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MISION DE LOS CAPUCHINOS EN GUAYANA 279 Comandante para constituirlas en doctrinas, ni menos dar el título de ministro de estos dos pueblos al P. Fr. José Antonio de Jerez, ex-Pre– fecto de las misiones del alto Orinoco y Río Negro, de los RR. PP. Ca– puchinos, que tiempo há que se mantiene en Maruanta y Panapana, com– placiendo al Comandante más que a su prelado el R.P. Comisario gene– ral, que tiempo há me consta que le envió orden que fuese a las misio– nes de Caracas con el otro su compañero el P. Nerja, por estar fuera de sus destinos. Es gran detrimento a la reducción de los indios guaraúnos no permi– tirles que se puedan poblar más abajo de la boca de Caroní y más abajo del presidio de Guayana, por motivo de que, si viniese el enemigo, no ha– lle en donde alojarse, que parece que poca subsistencia podría hallar en pueblos tan miserables; lo cierto es que se pierde mucho fruto espiritual, y se ganarían muchas almas para el cielo si se les permitiese fundar en esas distancias expresadas en que están las mejores tierras de labor para sembrar sus frutos; ni en la isla Trinidad hay quien haga diligencias de poblarlos; el Sr. Comandante por los soldados gastadores ha traído de las bocas del Orinoco muchos guaraúnos y los ha puesto en varios sitios o aldeas de la capital, y viene a ser temeridad, porque, como no hay tierras al propósito para sembrar, pasan mucha hambre y se vuelven, y se han hallado en las sabanas guaraúnos muertos de hambre, y así no tendrán permanencia estas aldeas o poblaciones. Algunos vecinos españoles que están en ellas más por fuerza que por voluntad, casi son tan pobres y ne– cesitados como los guaraúnos. Dice el Comandante que ya ve que no hay tierras y piensa que se perderán esas poblaciones así que él se vaya: man– ténganse mientras yo esté aquí: Esta voz es muy pública. Si se examina de dónde han venido los vecinos de las poblaciones pobres que tiene por aldeas, que llama, pocas se hallarán que no sean de las que pobló en Huyape, Ciudad Real, o Real Corona el Sr. D. José Iturriaga, y vecinos del Pao, y estos es poco adelantamiento que se ha hecho para el Orinoco, y viene a ser nada de fuerza para resistir al enemigo; lo peor es que de con– tinuo se le huye la tropa, y me consta que en estos días están de guardia solo los cabos. De la villa de San Antonio de Upata Con licencia del Gobernador de Cumaná D. José Diguja principia– mos la fundación de esta villa al mismo tiempo que con informes de di– cho gobernador pasaba a Madrid por Procurador de estas misiones el P.

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