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MISION DE LOS CAPUCHINOS EN GUAYANA 277 garon con los de Santa Ana en un mismo pueblo; sienten mucho dejar las buenas tierras de labor y estar en donde no las hay para sembrar plá– tanos ni los demás frutos que acostumbran. Las pocas tierras las aniega el Orinoco; en la sabana no se dan; además que sería menester cercar las labranzas, ni para esto hay bastantes palos y bejucos sino es muy lejos; no viven contentos ni los tenemos seguros; no pueden ver al corregidor; éste lo conoce que están violentos y por eso no les permite ir a pescar al Orinoco y a buscar la vida, porque teme que se le huirán o no volverán, y esto es motivo de estar más disgustados y siempre están con el tema de volver a Piacoa. Los aruacas y guaraúnos son como expresa el misione– ro en su matrícula. De las misiones de Maruanta y Panapana Ninguno con razón nos puede negar el derecho que tenemos a estas misiones no sólo por estar fundadas en el territorio concedido por Su Majestad sino por el trabajo que son de nuestras manos desde sus princi– pios, que los poblamos, fomentamos y administramos a los indios los santos sacramentos; los PP . Domingo de Arbucies y Fr. Angel de Besalú, misioneros de esta Comunidad, hicieron una entrada al Orinoco y trajeron 211 indios guaraúno s, y dimos gusto al Sr. Comandante general que qui– so que los pobláram os en este sitio de Maruanta, y el P. Jaime de Puigcer– dá hizo otra entrada a las bocas de Orinoco, de donde trajo una porción de caribes, y quiso también el Sr. Comandante que los poblásemos en Panapana con un capitaneja caribe fugitivo de Cali, que estaba preso y en la cadena. . . Nuestros religiosos misioneros que de principio han en· señado y catequizado a los indios de estas dos misiones son el P. Félix de Tárraga, el P. Tomás de San Pedro y el P. Jaime de Puigcerdá, y no tiene razón el Comandante para negarnos estos principios y proporcio – narse todo el mérito de fundador de ella. Estos dos pueblos están en el camino que va del Calvario a la capi– tal; todos estos indios de los dos pueblos están violentos y se huyen mu– chos, y de ordinario hay indios presos en la cadena por ser futigivos, y no quieren estar en ellos, y actualmente está puesto el expresado capita– nejo caribe con grillos , porque se le descubrió que se quería fugar con to– da la gente, y la causa es porque no tienen buenas tierras en que sem– brar sus frutos, y pasan mucha necesidad; el corregidor los mantiene con una poquísima ración de maíz, que no les satisface, y muchos van a pedir limosna a la capital. . . Luego que se fundaron estos pueblos les puso