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MISION DE LOS CAPUCHINOS EN GUAYANA 189 Es Secretario el P. Félix de Tárraga y Procurador, el que cuida con el síndico D. Félix Farreras, teniente de Infantería , hijo de Olot, de pro– curar las cosas necesarias para los religiosos y los indios. Tiene bastante trabajo en la misión de Caroní; luego que lleguen los Padres de España, tendrán un compañero. Fray Carlos de Barcelona, enfermero, tiene gracia para serlo y ejer– citar su oficio; tiene mucha caridad y cuidado con los religiosos enfer– mos y es aplicadísimo, y tiene buen acierto y docto en su oficio, que no he visto otro igual en estas misiones. Yo deseo que venga otro, que pedi– mos hace tiempo , y, siendo dos, estará más descansado el enfermero, por– que muchos pueblos están lejos y a veces el enfermo no puede ir donde está el enfermero, y éste ha de ir a veces atropellado. Y, una vez que ten– gamos misiones en aquellas tierras de la Parime, será muy necesario uno allá. Por últimos del año 1771 escribe nuestro Procurador general que presto se pedirían misioneros de nuestra provincia y que recibió de la corte este aviso, y en este mes de agosto todavía no aparecen. Una noti– cia ha venido: que un navío español varó en la isla de Anguilla y que traía once religiosos que venían al Orinoco , sin saber si son de Cataluña, y que ninguno se ahogó; y que otro navío, tal vez inglés con bandera de paz, los condujo a algún puerto de España, y que ya estarán en Santo Do– mingo. Nada más sabemos: vengan, pues, religiosos. Después he sabido que no eran Capuchinos. Quedo para servir a V.P.M .R. y ruego me encomiende a Dios, a quien suplico guarde a V.P. muchos años. Altagracia, 10 de agosto de 1772 años. Hasta ahora que va a Caracas el R.P. Conjuez primero a cobrar nues– tros sínodos, no ha habido ocasión de correr esta carta desde Caroní, y participo a V.P.R. que a primeros de octubre llegó a Barceloneta el des– tacamento entero, que menciono arriba, de retirada por falta de víveres y agua en los ríos, desde la cabecera de la Paragua, a donde no más lle– gó, y se ha vuelto a la capital sin más provecho. Quedo para servir a V.P.M.R. suplicando oraciones. Desde este pue– blo de Caroní y Guayana, a 3 de noviembre del año 72. Besa la mano de V.P.M.R. su más inútil súbdito y condiscípulo, Fray Benito de La Garriga, Prefecto.
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