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.MISION DE LOS CAPUCHINOS EN GUAYANA 43 que se perdió al siguiente año; también el de Piacoa, en 1760, al igual que el de Aripuco de Montecalvario. 4.-EI 21 de mayo de 1758 hizo la visita pastoral a la ciudad de Santo Tomé de Guayana el obi spo de Puerto Rico D . Pedro Martínez de Oneca. Sobre el estado de la misión hizo la oportuna relación que forma el capítulo VII del informe general de la visita enviado al rey . Consigna allí que los misioneros capuchinos tenían doce pueblos ele misión "to– dos bien fundados y algunos lucidos", en los que había más de 3.300 in– dios reducidos, aparte de otro pueblo ya en formación . De los religiosos dice que "trabajan con aplicación y fervor " pero que era preciso aumen– tarlos con ocho más, puesto que sólo eran 16, de los que uno era her– mano lego y el otro muy anciano . Expone la necesidad de tener una es– colta de soldados o por lo menos fundar un pueblo de españoles en la frontera para resguardo de la misión, ya que algunos pueblos estaban in– ternados tres jornadas de Esequivo y uno de ellos en las propias riberas del Yuruari por donde comerciaban caribes y holandeses , por lo que con– vendría hacer un fuerte en dicho río . 15 Por su parte el dinámico gobernador de Cumaná D . José Diguja y Villagómez quiso visitar a su vez Guayana y también los pueblos misio– nales de los religiosos capuchinos. El 28 de febrero de 1761 entraba en la caiptal de aquella provincia. El P. Cervera que anota esas fechas, di– ce sin embargo que Diguja visitó algunos pueblos de misión y que "que– dó muy contento de nuestra conducta y enseñanza". 16 En los extensos Autos formados por varias piezas, en que recoge los informes de su vi– sita, obtenidos unos personalmente y otros proporcionados por diversos sujetos, están los relativos a la misión de Guayana que van en la terce– ra pieza. Aquí se describe cada uno de los pueblos, situación, productos, habitantes, etc. , y, aparte de otras muchas notas, destaca que los misio– neros tenían un hato de ganado vacuno, hato que "sirve para proveer a to– dos los indios de cuanta carne necesitan, tanto fresca como salada, es– pecialmente de esta última y es el grande arbitrio con que se fomenta– ron las misiones en los 36 años que tienen de fundación y confiamos se aumenten grandemente". Tenía entonces de 14 a 16.000 cabezas de ga– nado vacuno, con sus caballos aparte. 17 15. Informe del obispo después de su visita, 22 junio 1758-10 mayo 1759 (AGI, Santo Domingo, 252, capítulo 7~). 16 . M. DE CERVERA, ms. c., n. 121. 17 . Informe del Prefecto P. Fidel de Sautó, 20 febrero 1761, en Autos de la visita de Diguja, tercera pieza, f. 64 (AGI, Caracas, 202).