BCCCAP00000000000000000000219

MISION DE LOS CAPUCHINOS EN GUAYANA 15 Es de justicia consignar también los nombres de cuantos en uno u otro sitio, Trinidad o Guayana, rindieron la vida en aras del celo apos– tólico. Fueron éstos, aparte de los ya enunciados: Fr. Angel de Llevane– ras (2 febrero 1693), P. José de Seva (8 octubre 1694), Lucián de Vic (noviembre 1694) Fr. Silvestre de Montargull (4 octubre 1694) y tomás de Barcelona (14 abril 1702). Cierran esta lista los gloriosos nom– bres de los PP. Esteban de San Feliú y Marcos de Vic con el Hno. Raí– mundo de Figuerola que fueron sacrificados bárbaramente por los indios en San Francisco de los Arenales. Creo pueden y deben ser considerados con toda justicia como verdaderos mártires. Por otra parte me consta que como tales han sido tenidos desde antiguo hasta nuestros días, y que sus restos mortales son aun venerados como reliquias de santos en San José de Oruña. 46 46. Sobre la muerte de estos tres misioneros hay abundantes documentos y relacio– nes. Publico la del P. Lorenzo de Zaragoza que, aunque extraño a la misión, recogió las noticias de boca de los misioneros. Esta misma relación fue publi– cada en Estudios Franciscanos, 21 (1918), 457-61. Hay documentos interesan– tes sobre lo mismo, proceso que se hizo, etc., en AGI, Santo Domingo, 582; también otra relación sobre el Archivo Provincial de Capuchinos de Andalucía. Y quizás el que más pormenores da sea el P. MATEO DE ANGUIANO, O. F.M. Cap., en: Misión apostólica en la isla de Trinidad de Barlovento . . . , Ma– drid, 1702, reeditada en Relaciones históricas de las misiones de Padres Capu– chinos de Venezuela, Madrid, 1928, formando parte de la "Colección de libros raros o curiosos que tratan de América", 21 serie, t. XXII.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz