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MISION DE LOS CAPUCHINOS EN GUAYANA 301 frutos. Hállase poblada con ciento y cuarenta y tres familias que las com– ponen cuatrocientas y treinta y nueve almas, y la iglesia proveida de las alhajas y ornamentos que parecen de inventario. El pueblo de San José de Cupapuy, situado la tierra adentro a dis– tancia de dieciséis leguas del castillo de Guayana, hacia el río de las Amazonas, tiene casa fuerte murada con troneras y dos falconetes mon– tados sobre tragantes. Se compone de ochenta y cinco casas con ciento dieciocho familias que numeran quinientas treinta y siete almas, con pesquería en el río Yuruari. La situación y aguas son saludables con suficientes tierras de labor para todo género de frutos aunque algo dis– tante del pueblo, y la iglesia se halla proveída de las alhajas y ornamen– tos que parecen de inventario. El pueblo de misión de la Divina Pastora del Yacuari, situado a veinte leguas la tierra adentro de Guayana hacia el río de las Amazonas, tiene casa fuerte con armería de fusil, guarnecida con escoltas del castillo y vecindario, y trece casas y veinte familias que las componen ochenta y tres almas. El temperamento con abundancia de aguas son muy saluda– bles y las tierras de labor escasas, porque el fin primario a que se ha atendido en esta fundación ha sido la abundancia de pastos y comodidad para el gran hato de ganado vacuno de estas misiones que no sólo sirve de manutención a su comunidad sino es que costean los indios neófitos que se reducen a población para su conversión, experimentándose que en este sitio se augmentan y procrean más sus naturales que en los demás pueblos de misión. Tiene su pesquería en el río Yuruari y cuasi todos los indios tienen más o menos sus cabezas de ganado vacuno y gozan de ración diaria del hato de los Padres, hallándose la iglesia proveída de las alhajas y ornamentos que parecen de inventario. En el pueblo antescrito pareció el capitán de nación panacayo, nom– brado Guayurumay, caudillo principal de la misma nación con otros dos cabezuelas de ella y, siendo dicha nación afecta a los Padres, experimen– tada de algún tiempo con algunos de sus hijos cristianos, y trayendo di– cho capitán por señal de su afecto de mucho tiempo a esta parte un peso de cordoncillo del cuño de vuestras reales armas, colgado por meda– lla a modo de venera, pidió licencia para poblarse en el sitio de Cunurí, diez leguas distante de la Divina Pastora, sujeto a la doctrina de los re– ligiosos capuchinos que ocupan estas misiones y al vasallaje de Vuestra Majestad; lo que por ahora le concedí, con acuerdo del R.P. Prefecto, y para ello presentó cuatro matrículas, a saber, de treinta y tres hom– bres de armas, treinta y ocho mujeres, veintitrés muchachos y dieciséis
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