BCCCAP00000000000000000000219

MISION DE LOS CAPUCHINOS EN GUAYANA 281 ción poner en noticia de VV. PP. M. RR. lo demás perteneciente al es– tado de estas sagradas misiones que por la divina misercordia van en feliz aumento. La misión de la Purísima Concepción de Nuestra Señora de Suay se fundó por mayo del año de 1724, y tiene 450 almas; bautizados, 378; difuntos, 107. La misión de San Antonio de Caroní tiene 390 almas; bautizados, 347; difuntos 98, y se fundó por junio de 1725. La misión de Nuestra Señora de los Angeles de Amaruca se fundó por noviembre de 1730; tiene 304 almas; bautizados, 160; difuntos, 20. La misión de San José de Cupapuy se fundó por noviembre de 1731; tiene 400 almas; bautizados, 219; difuntos, 19. La misión de San Francisco de Altagracia se fundó al mismo tiempo que la de Capapuy; tiene 580 almas; bauti– zados, 369; difuntos, 29. Participo asimismo que en este año pasado de 33 hemos tenido muchos enfermos: el R.P. Fr. Tomás de Santa Eugenia, el P. Buenaven– tura de Valls y el P. Fr. Basilio de Barcelona, y éste todavía está con calenturas: quiera Dios que se asiente. El P. Fr. Dionisio de Barcelona, después de medio año de enfermedad, murió en el Señor día uno de di– ciembre del año de 33; su feliz muerte fue manifestación de su santa vida, porque, hallándose en el último día de su vida con robustos pul– sos, dijo lo dejasen dormir; durmióse; a cosa de una hora se reconoció y apenas se pudo discernir de que se hallaba en los últimos extremos del vivir, pues, sin romper su sueño, obdormivit in Domino; en esta ocasión dejó de ser amarga la muerte para mostrarse dulce suave sueño. En fin, recibidos con especial devoción todos los sacramentos, perdimos un hermano y compañero ejemplatísimo, religiosísimo, seráfico y apostó– lico. En su enfermedad contemplábamos en él ya a otro Job y ya a otro Tobías porque a entrambos seguía puntualmente las huellas: "entrete– nimientos del Señor" llamaba a su enfermedad dilatada. Los hermanos caribes este año pasado de 33 quisieron acabar con todos nosotros, pero quiso la divina providencia poner freno a su bar– baridad, porque pedimos socorro a la costa y de Trinidad y Cumaná vi– nieron gente y los castigaron en varias refriegas que tuvieron; mataron un soldado y hirieron a 8, y ya vuelven ahora a levantar cabeza, como enemigos capitales de Padres y de misiones, de suerte que de día y de noche están nuestros indios y la gente de Guayana sobre las armas ha– ciendo varias guardias porque dichos caribes son muy belicosos y riñen con armas de fuego, como los españoles, las que les venden los extran– jeros por otros tantos indios e indias que los caribes les dan por sus es-

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz