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MISION DE LOS CAPUCHINOS EN GUAYANA 261 79 Certificación del Prefecto P. Tomás de Santa Eugenia sobre lo realizado por el gobernador de Trinidad y Guayana en pro de las misiones de esta última provincia y de cuanto en ellas habían trabajado los religiosos capu– chinos (Purísima Concepción de Suay, 3 marzo 1731). - Copia autenticada (Archivo de la Corona de Aragón, Barcelona, Fon– dos monacales-Universidad, leg. 56, tomo 1~, _folios 146-47). Fray Tomás de Santa Eugenia, Ex-Lector de Teología, predicador, misionero apostólico y Prefecto, aunque indigno, de las misiones de esta provincia de Guayana, etc. Certifico, para que conste donde convenga, que el Sr. Don Agustín de Arredondo, gobernador y capitán general de esta dicha provincia de Guayana e isla Trinidad por el rey nuestro señor, que Dios guarde, vino a esta provincia por el mes de enero del año pa– sado de 1727, con el motivo de hacer la visita de su obligación, como en efecto me consta haberla hecho, dando diferentes providencias para el buen gobierno de los vecinos y militares del presidio, a fin de que se con– servasen en paz y unión para la conservación y adelantamiento de posesio– nes y caudales, solicitando en todo, con buen celo, el mayor servicio de entrambas majestades. Pasó asimismo dicho señor gobernador a visitar los pueblos de es– tas nuestras misiones y, después de haber matriculado en ellos los indios que los componían en cada uno de dichos pueblos, eficazmente los exhor– tó a la obediencia que deben a Su Majestad, dándoles a entender, con el modo posible, el amor que le debían, pues con su católico celo no ce– saba, a expensas de su real patrimonio, de solicitar su conversión y todo su bien, mandándoles y manteniéndoles predicadores que les predicasen el santo Evangelio y les enseñasen la ley de Dios, como lo estaban expe– rimentando; encareciéndoles asimismo con eficacia el respeto, obedien– cia y veneración que debían a sus Padres espirituales los misioneros, que los poblaban, enseñaban y educaban, hallando nosotros en dicho caballe– ro gobernador muy cristianas y devotas atenciones, atendiéndonos con mucha fineza, de que quedó esta religiosa comunidad muy agradecida. Y en el mismo año de 27 repitió la vuelta a esta provincia el refe– rido gobernador a causa de haber tenido noticia que los holandeses e in– dios caribes intentaban invadir y destruir la ciudad de Guayana y apode– rarse de su real fuerza, noticias que consternaron tanto a la corta vecin-