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106 FUENTES PARA LA HISTORIA COLONIAL DE VENEZUELA Dadas en nuestro convento de Cádiz, a 20 días del mes de junio de 1687. 9 Ordenaciones dadas a los misioneros de Trinidad y Guayana por el P. Prefecto Tomás de Barcelona (San José de Oruña, 30 septiembre 1687). Copia (Biblioteca Universitaria de Barcelona, manuscrito 142, Relaci6n de la misión apost6lica que la santa provincia de Capuchinos de Cataluña tiene en la is– la de la Trinidad de Barlovento, Guayana y del Do– rado, parte segunda, capítulo II, pp. 93s.). Primeramente se guarden y observen los apuntamientos de nuestro Rmo. P. Comisario general. 2? - Que todos los días de trabajo se rece a los indios por la ma– ñana, a lo que quiere salir el sol antes de la misa las oraciones del Padrenuestro, Avemaría, Credo, mandamientos de Dios, de la Iglesia santa y sacramentos. Después les hará algunas preguntas de los miste– rios necesarios de nuestra santa fe, y, en acabando, todos juntos el acto de contrición, por ser los indios tan rudos lo sepan de memoria para hacerlo cuando han de recibir algún sacramento. Al instante se dirá la misa, quedando en ella los indios que tuvieren devoción, y los otros, al trabajo. 3? - Acabada la misa, después de haber dado a Dios nuestro Se– ñor gracias, visitarán las casas de los indios por ver si hay algún enfer– mo, y si ha parido alguna mujer. Y esto es necesario porque, estando enfermos, suelen irse al monte algunos y esconder las criaturas, y en lo que se pudiere, se les asista en sus enfermedades. 4? - Un poco antes de las Avemarías o a la que se quiere poner el sol, se tocará a rezar y juntos cantarán todos las oraciones, y después se harán las preguntas como arriba y, acabado el acto de contricción, toca– rán las Avemarías y el misionario las dirá con voz alta, siguiendo los demás, concluyendo: "Sea alabado el Smo. Sacramento". 5? - Todos los sábados por la tarde, a la hora de rezar, se canta– rán las letanías de Nuestra Señora, Salve, y, acabadas las oraciones, se pondrá en medio de la iglesia entonando un responso por las almas, y, al Pater noster, tomará el aspersorio y echará agua bendita al pueblo.