BCCCAP00000000000000000000219

96 FUENTE.s PARA LA HIS'i'ORIA COLONIAL DE VENEZUELA co ofrece entrada navegable para todas partes, como muchas veces le tengo representado a V.M. Y así, por el conocimiento que tengo de to– do este país, hallo por muy del servicio de V.M. que esta parte de mi– sión se concediese a la provincia de Cataluña, sirviéndose V.M. de man– dar al Provincial la aceptase y asistiese de religiosos según fuesen menes– ter, conforme los indios que se fuesen reduciendo, y en lo que tengo ex– perimentado en dieciocho años que he conocido misiones de Capuchi– nos, hallo son de poco costo a la Real Hacienda; y aquí mandando V.M. que se asistiese a cada sacerdote con el sueldo de un infante de los que sirven en este castillo, era suficiente para su congruo pan, vino y cera: en la conformidad que han quedado aquí estos religiosos. Consta del tes– timonio adjunto. Espero el orden de V.M., cuya católica real persona guarde nuestro Señor como hace menester. Trinidad y septiembre, 16, de 1682. - D. Tiburcio de Axpe y Zúñiga (firma y rúbrica). 3 Recomendación de D. Tiburcio de Axpe y Zúñiga al rey para que se con– tinúe la misión de Guayana por los Capuchinos (La Guaira, 11 diciembre 1683). - Original (AGI, Santo Domingo 677). Señor: En dieciséis de septiembre del año pasado de seiscientos y ochenta y dos dí cuenta a Vuestra Majestad de que había puesto dos re– ligiosos capuchinos en la Guayana para que entendiesen en la catequi– zación de los muchos indios que allí asisten y principalmente de los que están reducidos a pueblos, por la gran necesidad que hay de quién les enseñe la doctrina y administre los santos sacramentos. Y remití testi– monio de los autos que se hicieron porque, visto en el Real y Supremo Consejo, V.M. mandase continuar a estos religiosos y que recibiesen es· ta misión a su cargo para que el su Provincial le asistiese con los reli– giosos que se necesitase, pues en el ínterin que V.M. mandaba lo que fue– se de su servicio, quedaban estos dos religiosos. También dí cuenta a la Real Audiencia de la ciudad de Santa Fe y se mandó despachar Real Provisión, encargando a los religiosos la asis– tencia, dándoles gracias de haber condescendido a mi pedimiento, porque el año antes me mandó Su Alteza procurase entrar en Guayana Capuchi– nos. Ahora ha determinado el un religioso pasar a representar a V.M. lo

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz