BCCCAP00000000000000000000215

ángulo solitario del templo, lla.l)lad en v~es– tro auxilio a todas esas verdades transcenden– tales, meditando sobre ellas con meditación. profunda y dilatada, hasta convertirlas en carne de vuestra carne, sangre de vuestra sangre y adhesión íntima de todo vuestro ser. Entonces el ideal de luz fría que brilla en vuestra inteligencia descenderá. hasta vuestro corazón, convertido en ardiente llama. Enardecido por ella, tomad vuestra pluma y escribid o preparad vuestro sermón, y lue– go lanzaos confiadamente por esos mundos a conquistar almas para Jesucristo, supliendo lo que falta todavía a su obra divina de Re– dención, y yo os aseguro que vuestra actitud exterior, vuestros ademanes y las inflexiones y el acento de vuestra voz serán lo que de– ben ser, para obtener el efecto apetecido~por– 'que os lo enseñará el amor, el amor, que, cu.ando es santo, todo lo hace bien. i Predicar es amar ! V e7le alicui bonum, como dice Santo Tomás de Aquino. Y en este

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz