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u cn, con qué sentimientos de piedad, con qué amor a Jesu– cristo Sacramentado! Fué creciendo, siempre firme en la inocencia, en la devo– ción, en el amor de Dios; pero empezó a sentir una cierta inquietud, un cierto hastío del mundo; no se hallaba a gusto en el siglo; era el principio de la vocación religiosa, por la que quisiera consagrarse enteramente a Dios. Por aquellos días, cuando tenía 17 años, apareció por Camporroso un religioso de nuestros Padres Conventuales. Fué ello una revelación para su alma; pocas conversaciones con aquel religioso bastaron para resolverse. Se decidió, después de pedir con mucha insistencia a la Santísima Virgen, acierto en su resolución, a ingresar en la orden de los Padres Fran– ciscanos Conventuales. El creía ser allí, a donde Dios le lla– maba. Dos años estuvo con ellos en calidad de Terciario. Su corazón parecía desear algo más, más austeridad, más peni– tencia. Un día vió en la iglesia de su convento un joven Capu– chino, arrodillado ante el altar del Santísimo Sacramentado, abismado en profunda adoración. Era tal su actitud, que pare– cía estar en éxtasis. Fué una aldabada a su corazón. Creyó que había encontrado lo que tanto y tanto ansiaba su alma. Se di– rigió pues a los Capuchinos, y fué admitido entre ellos en Gé– nova, en el convento noviciado de San Bernabé, donde tomó el hábito de novicio, después de pasar un año de postulantado. Terminado el año de la probación fué trasladado al con– vento de la Inmaculada Concepción, en el mismo Génova. para cuidar a los religiosos enfermos de la enfermería que allí tenía establecida aquella Providencia Capuchina. Tres años estuvo dedicado a aquel oficio, sirviéndolos con todo el ca– riño y amor que en él podría poner la más tierna y cariñosa rnadre. Los Superiores lo destinaron después a Limosnero, pri– mero en los pueblos de la campaña, tres años; después en la misma ciudad de Génova, 37 años. Pronto se percataron todos, de la santidad de aquel Hermano Limosnero. j Con qué respe– to, con qué veneración se le miraba! Con placer se le daba la limosna material, pero él correspondía con otra limosna más - 94 -

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