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1 - 2. EL SERAFICO PADRE SAN FRANCISCO DE ASIS (1182 - 1226) He aquí una fig ura de las más relevantes y grandiosas que han pasado por la tierra. Fué contemplado con admiración a su paso, y su recuerdo es hoy tan vivo como a los pocos días de su desaparición de entre los hombres. Es que vive, vive toda– vía en sus obras, y vivirá hasta el fin del mundo en los frutos que sus obras producirán hasta áquel día. Esa grandeza admirahle que así atrae las mira.das y los co– razones de tantas generaciones, no reconoce otra causa que su semejanza, por ningún otro hombre igualada, del modelo de todos los hombres, nuestro divino Salvador_ "Alter Christus" , un otro Cristo, ha sido llamado, en todo semejante al primero en su lado humano, es claro; un Cristo sin divinidad. · Una leyenda - tal vez no revista los honores de la tradi- ción- una leyenda asegura que Francisco nació en el establo de su casa. Esa leyenda cuenta que estando su madre Pica en trance de darlo a luz con agudísimos dolores sin poder llegar al fin deseado, apareció en la puerta de su casa un peregrino desconocido, como a pedir una limosna, y oyendo hablar dd estado doloroso de la Señora de la casa, dij o resueltamente: "La Señora dará a luz inmediatamente y con toda felicidad, si la bajan al establo". Y, dicho esto, desapareció al instante. Se recibió ello como un aviso del cielo; y bajándola al establo, "peperit filium suum primogenitum", dió a luz con toda felici– dad y sin dolor alguno al hijito primogénito, que empezaba ya a parecerse al Divino Jesús. Nada de extraordinario ofrece su educación en la infan– cia y en la niñez; fué formado como se forman los niños con una madre verdade:-amente cristiana, como lo era Pica. Ya en la juventud, se dejó llevar de la vanidad y bullanga juvenil, viniendo a ser como el rey de la j uventu¡l de Asís; pero no dice la crónica nada de corrupción ni inmoralidad de ninguna clase, señal ma:1Ífiesta que supo conservarse en la dig– nidad compatible con esa vida de disipación y distracciones. Cuando llegó el tiempo en que Dios quería manifestarle para qué lo tenía destinado, lo -fué preparando con algunas ad- - 9 -