BCCCAP00000000000000000000191

Irulegui. En D. Guillermo Goyeneche, contratista de la piedra, recaen los co– bros más sustanciosos: 8.000, 12.000, 40.000 reales s/órdenes de pago. El ramo de carpintería va historiado en 5 libretas. Es madrugador: del 7 de abril de 1888 datan los primeros asientos, que, hasta 19 de octubre de 1889 totalizan 7.495,75 jornales, con una inversión de 78.963,77 reales; sueldo osci– lante entre 10 y 11 reales. Desde 21 de octubre de 1889 a 24 de enero de 1891 se anotan 8.993,125 jornales, que se estimaron en 92.377,77 rs.Salario común desde mayo de 1900 es el de 12 reales al día. Son los más constantes Jaurena, Dolhagaray, Celayeta y Lezáun; y los más calificados el maestro Antonio To– masena, y el equipo Sagarzazu-Lapitz, llegado de Fuenterrabía en marzo de 1889. Aserrador especializado, Gregorio Gárate. Entre los carreteros los hubo que sacaron madera del monte de Ciga por el pan y la olla. Otros (Manuel Aristizábal, Antonio Lerchundi, Francisco Iri– berri, Francisco Martiarena...) se repartieron 2.030 reales por 89 viajes de ma– dera, desde 20 de abril a 16 de julio de 1888; desde el 6 al 11 de agosto se pa– garon a 20 reales el viaje. Se trabaja roble de la Ulzama y de Errazu; roble y castaño de Santesteban y Zubieta, castaño de Almándoz, Narvarte, Berroeta y Garzáin. Hay porteadores de la regata, de Arraiz, de Burutáin y de Olagüe. El transporte de arena desde Arráyoz (meandros del río) se paga a 8 reales el carro. Por tablas de roble se entregaron 25.704 reales a Benito Díaz de Pamplona (26 de abril de 1889); 2.000 a Felipe Elorga; 1.120 a José Perochena de lrurita; 7.316 a Manuel de Urcola de Elizondo; 1.139 a Juana Teresa Vicondoa de Eli– zondo, etc. Carreteros notables fueron los de Dª Josefa Viscarret (Casa Canario de Irurita), que transportaron desde Irún cargamentos de columnas de hierro. Los cuezos de cal se compran en Aniz, Oronoz, Garzáin y Arizcun; principales proveedores de yeso en la primera etapa fueron José Ohárriz y D. Tiburcio Hu– lade, de Irurita, a 4 reales el saco; les sucedió otro vecino de Irurita, Pedro Al– dasoro en la primacía. El 23 de junio de 1888, fecha en la que se abrieron los cimientos, con– sulta el "aparejador" Fray Félix de Azcoitia al P. Llevaneras, por vía de urgen– cia, si sanciona su idea de levantar a poniente el edificio colegial, por las razo– nes siguientes: los alumnos se distraerán menos que si estuviesen al oriente, que es la parte por donde se ha de trazar el camino; las horas de sol han de ser más favorecidas, principalmente en invierno (nieblas matinales); "en el verano para bañarse tendrán el estanque más cerca, así como el bosque para dar sus paseos". Espera contestación inmediata, porque aún son posibles las en– miendas 11. Cuando se juzgaba suficiente el alzado y se colocaron los durmientes, se presentó el Rdmo., que se mostró disgustado por parecerle aquello un corra– lón. Se colocaron los muros, hasta la que fue altura definitiva, comenzando por el pabellón que había de ocupar la comunidad y, por iniciativa del propio Lle– vaneras (testimonio del P. Eusebio de Echalar) se proyectaron las dos super– puestas galerías, acierto de luminosidad y de climatización. 11. Joaquín Plaza al Rdmo. P. Joaquín M' de Llevaneras, Min. Prov,; Lecároz, 23 de junio de 1888: ACL, A-1. 26