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J:J:::'3"'D:COE Págs. Dos palabras del traductor . 5 La cuestión misional, el Apostolado Católico y algu- nas palabras de introducción . 11 CAPÍTULO I.-Las vocaciones misionales. 32 1. 0 Qué es una vocación. 2. 0 Ventajas de las lec– turas sobre asuntos de misiones. 3. 0 La prueba de los hechos. 4.° Consejos a los Directores de Seminarios y Colegios. 5. 0 Principales publica– ciones de índole misional. CAPÍTULO JI.- Cómo se conoce una vocación misional 44 1.º Las señales de la vocación. 2. 0 El celo de las almas. 3. 0 Los fines secundarios no se oponen a la seriedad de una vocación. 4. 0 Extrañas reve– laciones de una vocación misional. CAPÍTULO III.-El primer escrúpulo del Misionero. ¿Soy yo verdaderumente llamado de Dios?. . 50 1. 0 Uno de los mayores tormentos del aspirante a misiones. 2. 0 Una cuestión que hace a nuestro caso. 3. 0 Todo sacerdote es misionero. 4. 0 ¡Fue- ra el miedo! CAPÍTULO IV.-Los Institutos de Misiones 55 1.º Leccioqes de una expedición militar. 2. 0 Gran ciencia mis,ional. 3. 0 Adaptar la educación a las aptitudes naturales y morales de cada uno. 4. 0 Síntomas de decadencia. 5. 0 Elenco de varios Institutos misioneros. CAPITULO V.-Cómo se alimentª una vocación mi- sional. . . . . . . • . 61 1. 0 Ni Dios ni la naturaleza obran a saltos. 2. 0 La piedad del aspirante a misionero. 3. 0 La en– mienda de los propios defectos. 4. 0 Un prejuicio dañoso.