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ART. II-OBEDI!,:,:c1A AL PAPA V SU:. DE S. FRANCJSCO i.5 - - -- :2. Pero s-ea cual f,u,ere el alcance de la prumesa Jel seráüco Padre, lo que no pue1d,e pon,ers-e en tiela de jui'eio, por ser ya de cherecho definido, es: i.º que los re1'igiosos, al igual que lodos Ios cristianos son súhdi– tos inmerdiato,s del Romano Pontífice (9); y__ 2.º qu,e el Homano Pontíflcie ies para todos los r,eligiosos el pri– mero y supre:mo Su 1 perior, a quien -están obligados a obed€1CeT, taimbién en vir,tud del voLo d-e obediencia (10). Consta así mismo qure el rnligioso debe a la Curia llomana, y particuLarmrentie a la Congr,egación d,e Re– ligiosos, así como lambién a los Delegados A11ostóli– eos, cuando están im:es tido,s de especiales faculta•dies r,esrpm~to de los religiosos, la misma obeidfo.:icia que al Sumo Pontífice. 21. Espíri¡t.u de la ·Regla respecto del !Romano Pon– tífice. 1. No conviienen, como hemos visto, los intérpre– tes en de·herrminar el akanc,e jurídic,o de la promesa de nuestro seráfi 1 co Pa!dr,e; prero en cambio están fuera de conit:rov€rsia las intencio,nes, qUJe tuvo al hacerla. Quiso ant,e l'Oido por €1Ia, según hac-e constar su biógrafo Tomás d,e C,elano (1 i), incul 1 car a su O:rtder1 una sumisión i,n1condicio11al a la autoridrud de la Santa S,ed,e, ~i así o•bt,enier para su numerosa familia un fuer– te vínculo o princi1pio <l€ unidad, quie la preservas-e si·e,mpr,e de la div'isión y •de la I'Uina. Y quiso qu,e esa sumisiórn a la Santa Sede no se limi<tas,e al simple curnpHmi,ento de sus manrdatos, sino qu,e a:drerrnás estu_ vi 1 ese a:cormpañalda d,e tal venera·ciórn y .a:fo,cto filial, que sus religiosos no sie p:er,miti-esen nunca palabras de munmuración y orítirca, y mienos d,e injuria o rebeldía contra ,ella. Esto está indi 1 cado en la "rev,e•rencia" que juntrumencte Cün la ob-e 1 di 1 en1cia prom:et,e ,el s,eráfico Pa– rir-e a la Iglesia Romana. Quiso tambi<én San Francisco que esa obecfümcia fuese to,tal, es decfr, a to·das las dire,ccion>es y decla•• racion.es de la Santa Se•d€, sin excrep'Luar !las qu,e ,pu– dieran versar sobrre la misma RJegla. (9) Conc. Vaticano, sesión IV; Denzinger, n. 1827. (10) c. 490. § 1. 0 • (11) Legenda secunda, c. 16. Ed. E. de Alencon, p. 186.