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70 Comisario General para tratar los negocios con el Go– bierno central y con d Nuncio Apostólico; de modo que ejercía dos ministerios. 3. 0 Ultimos tiempos: de 1893 al presente. Pero después de la abolición del imperio y de la separación de la Iglesia y el Estado, cambiadas total– mente las circunstancias, cesó el Comisariato, por De– creto de la misma Congregación, del día 31 de julio de 1893, porque la finalidad de su institución ya no existía. Además, por cuanto las regiones, para las cua– les se habían creado las Prefecturas, estaban ya civi– lizadas y traspasadas a los respectivos Ordinarios, y ya no dependían de la S. C. de Prop. Fide, también cesaron las Prefecturas. No obstante, las facultades concedidas por la S. C. a los Prefectos, duraron mientras permanecieron en el cargo. Vacantes las Prefecturas, el Ministro General nombró Superiores Regulares. Durante este tercer periodo se hicieron muchas nuevas fundaciones, pero de otro carácter, en varias provincias del Brasil. A petición de los Ordinarios, aceptaron los misioneros encargarse de las parroquias en diversos lugares; en otros levantaron conventos, cu– yos Padres ayudaban en el sagrado ministerio al clero, o practicaban correrías apostólicas y daban ejercicios espirituales. La misión de Bahía ·por Rescripto de la S. C. de :Negocios Eclesiásticos Extraordinarios, 9 de febrero 1892, fué encomendada a la provincia de Pisa. Misioneros.--iCapuchinos: Padres, 13; hermanos, l.
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