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37 diantes de ambas provincias; esto es, Renano-Westfá~ lica y Navarra. Los Superiores provinciales de Navarra declararon que estaban dispuestos -cuando la Sagrada Congre– gación lo establezca-, a quedarse en calidad de mi– sión propia la parte septentrional; esto es, ~a provincia civil de King-yuen-tau. El año 1927 se crearon seis nuevas residencias, y en 1928, cuatro más. El número de católicos es como sigue: 1922: 3,178. 1924: 4,243. 1926: 4,807. 1927: 5,502. 1929: 6,500 (todos indígenas). Las perturbaciones de la guerra dificultaron la ac– ción de los misioneros, pero no la frustaron del todo. Las autoridades civiles de antes han sido suplanta– das por otras que, aún cuando no favorezcan la religión cristiana, no se muestran hostiles a ella. Los misione– ros protestantes - excepción hecha de dos o tres-, abandonaron la provincia. En cambio, la actitud con– traria de nuestros misioneros conmovió en gran manera el alma de los católicos chinos, y aún también la de los paganos. Entre las obras comenzadas el año 1927, haremo~ especial mención de las siguientes : En Hwei-hsien se fundó un pequeño seminario; en T!:>inchow una escuela para formar metódicament~