BCCCAP00000000000000000000169

DE LA CONTEMPL'ACION 67 adelante admitiendo la posibilidad de una perfec– ción extraordinaria sin contemplación infusa. Es cosa que parece evidente que ciertas almas heroicas en el ejercicio de muchas virtudes, nunca llegaron a tener contemplación pasiva. <<Dividens singurns prout vult.» «Non est currentis neque quaerentis sed rniserentis Dei.» La afirmación de que hay unidad «in ordine gra– tiae gratum facientis», es verdadera en algún senti– do, pero no en todo sentido, porque contradice a la atribución que se da a Dios en la repartición de gra– cias. De modo que la aocesibilidad de la oración mística (contemplación) para todas las almas no se prueba :aunque el P. Efren, interpretando al Seráfico Doc– tor, diga que: «S. Bonaventure a beaucoup insiste sur cette doctrine ... » Se cita el trozo oratorio del Santo Doctor que dice: «Modo non debetis despe– rare vos simplices, quando auditis ista (grados de contemplación) quia poteritis habere.» ¿ Quién lo du– da •que pueden si Dios les da? Por lo mismo que Dios puede otorgarla a quien le place, ¿ por qué han de desesperar los simples ? Pero en otro lugar aña– de: «Humano studio non potest obteneri, humano merito non potest promereri ( 1) .» Ni puede mere– cerse ni obtenerse por humano mérito·. .Para que Dios obre en. la forma que obra en las almas místicas, siendo éstas pa:sivws, necesitan es- (1) Soliloquium, c. II, núm. 14. La accesibili- dad de esta contemplación.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz