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La bibliote– ca teresiana. CAPITULO IV INFLUENCIA FRANCISCANA EN SANTA TERESA Y SAN JUAN DE LA CRUZ El Padre Silverio, en su edición critica de las obras de Santa Teresa, el cap. XIX de Camino de perfección en una nota escribe que la Santa en las primeras Constituciones ordenó: «Tenga en cuenta la priora con que haya buenos libros, en especial car– tujos: Flos sanctorum, Contemptus mundi, Orato– rio de religiosos, los de Fray Luis de Granada y del Padre Fray Pedro de Alcántara.» Ocurre, pues, que en la Orden carmelitana las in– fluencias pudieron ser varias, como fueron varios de diferentes Ordenes los confesores y directores de la Santa. Lo que parece indudáble es que la influen– cia predominante fué la franciscana, y con esto no queremos deprimir a ninguna de las otras, sino dar base a nuestra exposición. Desde luego había dos cartujanos. Lodulfo de Sa– jonia, autor de Meditaciones vitae Christi ( 1), que ella usaba con asiduidad y provecho grandísimo, y (1) Ya hemos apuntado que últimamente se le atribuye al franciscano Caulibus con alguna probabilidad.