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INFLUENCIA EN LA «IMITACION DE CRISTO» 167 París y que fueron examinados por 19 sabios en 1687. Podía alguno equivocar Gerson con Gersen, mas en el manuscrito de Arana enviado por los Padres Jesuítas, se ponía la profesión y nombre del autor «Incipiunt capitula libri primi abbatis J ohannis Ger– sen», y este nombre y profesión se repetía hasta cin– co veces. En un ejemplar impreso en Venecia en 1501, se indicaba incluso la abadía y la diferencia entre Gerson y Gersen: «Hunc librum non compi– labit J oannes Gerson sed D. J oannes Abbas verce- · lensi's ut habetur usque hodie manuscriptus in eadem abatía.» El jurado abandonó completamente a Kempis y proclamó como autor de la J mitaci6n al abad Juan Gersen. Ahora enti:a por completo nuestro tema. Ya se sabe que el libro de la Imitación era conocido con el título: Contemptus mundi. El autor del libro debe ser seguramente una per– sonalidad eminentemente mística y consumada en la ciencia de los santos. El autor proclamado vivía en 1222 en opinión de gran santidad, tanto que el Se– ráfico Patriarca fué a verle y se conocieron ambos espíritus íntimamente. En este mismo año de 1222 le envió Francisco a su predilecto discípulo San An– tonio de Padua para que aprendiese del abad verce– lense la teología que debía luego enseñar. El escri– tor Delassús cree que el autor de la Imitación ha– bla de su santo discípulo Antonio cuando dice: Relación en– tre San Fran– cisco y Gersen.