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- 141 - pluma quiéroos. recomendar la frecuenta l_ectu– ra de este catecismo)· donde hallaréis motivos de santo orgullo, razones de vida santa y estí– mulos de perseverancia en ésta V. O. T. de San Francisco. . Debéis poner los ojos constantemente en dos cosas. 1. ª En las promesas que Cristo hizo al Santísimo Padre para todos sus hijos: y 2. ª En la gracia especial que habéis reci– bido del cielo al ser alistado en las filas de San Francisco, inmortal caudillo de los ejércitos de Dios. Si así lo hiciéreisJ no será extraño que más de.una vez repitáis con León XIII. Nos gloriamos de ser inscritos en la /amilia Franciscana. (Auspicato). Ese gran Papa y gran Terciario modelo de todos, los terciarios. Desde que se ciñó sus hábitos pontificales con la cuerda del Seráfico Padre, ha sido el más apasionado seguidor de sus huellas y el más entusiasta admirador de sus glorjas · -¿Qué me dai.s por último consejo? .:_Que re-novéis cada año cuando menos, la profesión que habéis hecho en la Tercera Or– den. Señaladamente· debéis practicar esa d~vo– €ión el 16 de Abril, aniversario de la que hizo el Santo Padre .en manos de Inoceticio III el año 1208. Todos los Franciscanos acostum– bran celebrar ese día con una santa y fervorosa renovación de sus promesas profesionales.