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-38- María.-"El mundo no se ha entregado ex– clusivamente, por más que se .diga, al tráfico de la moneda. Las ideas son todavía pode– rosas"-. Por consiguiente: 1. 0 El Sacerdote de María debe estable– cer el culto de la Señora sobre su verdadera base en todas las pláticas espiritualeíi. Ella es Madre del cristiano como Madre de .Dios, por razón de _su dignidad de Esposa del Espíritu Santo y Esposa del nuevo Adán. Como Esposa del Espíritu Santo, es Madre de Cristo, Jefe de este cuerpo místico, cuyos miembros somos por el Bautismo. Esposa del nuevo Adán, es la nueva Eva, es decir, su asociada en nuestra regeneración espiri– tual por la Redención. Y como el cristiano no llegaalpleno desenvolvimiento dé la vida sobrenatural sino en el cielo, con respecto a María, se encuentra siempre en el estado de la infancia, y depende de Ella en la conser- . vación y en el desarrollo de la vida. 2. 0 Debe insistir frecuentemente sobre la parte que corresponde a María en nuestras promesas del Bautismo, sobre la comunica– ción que debemos tener con Ella en la recep– ción de los otros sacramentos, sobre el papel importante que desempeña eri la distribu'~ ción· de la gracia actual, y, en fin, sobre sus