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* * * No podemos ,143 desde luego, pasar en olvido la figura destacada del P. Serafín de Policio, primer Comisario y superior, y podríamos decir fundador, aunque no exclusivo; su personalidad, a nuestro juicio y al de aquel que mire con imparcialidad las cosas, ha de resultar un tanto compleja. Y decimos compleja porque no acertamos a explicamos la razón de su extraño comportamiento en las varias vicisitudes de su vida. Justamente han sido los cronistas primitivos de la Provincia [de Castilla] los que más se han recatado de prodigarle alabanzas; es más: los que más han criticado su gobierno y su conducta. En cambio los extraños unánimemente le alaban. Fue natural de Policio (Polizzi) (Sicilia), y descendía de la familia de los Señorinos. Cuando solamente contaba dieciséis años fue admitido entre los capuchinos de la Provincia de Palermo. Más tarde, y sin duda después de haber recibido el sacerdocio, era contado entre los destinados a la fundación de Cataluña, donde desempeñó el cargo de Maestro de novicios. En el Capítulo provincial celebrado en Montecalvario [Barcelona], el 27 de septiembre de 1596, cuando se determinó fundar en Valencia y enviar a ese objeto siete religiosos, entre ellos también se encontraba el P. Policio, prueba inequívoca de la estima en que era tenido. En Valencia fue designado primer Guardián y asimismo primer Maestro de novicios, y durante los cuatro años que allí estuvo desempeñando esos cargos gozó de la amistad del Patriarca, beato Ribera, del futuro duque de Lerma, D. Francisco G. de Sandoval y Rojas, y del conde de Be- navente, D. Francisco Pimentel, cuando uno y otro fueron allí virreyes. Asimismo se esforzó en educar convenientemente a los que entonces tomaron el hábito y formarlos en el verdadero espíritu capuchino con sus palabras y más aún con su ejemplo. 143 BUENAVENTURA DE CARROCERA, La Provincia, I, 559-363, trae una pequeña biografía del P. Serafín de Polizzi. 143