BCCCAP00000000000000000000157

L A S M I S I O N E S C A P U C H I N A S E N U L T R A M A R La Orden Capuchina, como una afirmación que es del franciscanismo, lleva en sí misma el caráctermisionero. Por expresa voluntad del Padre San Francisco -recordemos como lo ratifica­ ba ante el martirio de los primeros franciscanos enviados amisionar en Marruecos- es eminen­ temente misionera. El mismo fue llamado «varón todo católico», esencialmente apostólico. Esta herencia es la que acepta y prolonga la Orden en el tiempo y para la eternidad. La faceta de la labor apostólica allende nuestras fronteras, tanto con la misma implantación de la Orden en estos reinos constituyen dos epopeyas difícilmente expresables, no ya en estas líneas, sino en un tratado. Con todo, trataremos de subrayar o dejalonar los hechos, los lugares y los personajes más representativos de estas Misiones. AFRICA Los comienzos de la labormisionera en ultramar se señalan en 1645 con la participación del P. Angel de Alicante, el P. Gabriel de Valencia y el P. Antonio de Teruel. El primero llegó al Congo el 25 de mayo de el referido año 1645, y los otros dos en una segunda expedición. AMERICA Darién fue laprimeramisión autorizada por laCongregación de PropagandaFide y permitida por el Consejo de Indias a los Capuchinos y en cuyas expediciones formaron los valencianos. Entre los designados figura el P. Lorenzo deAlicante, que llega aestamisión a finales de 1647. En 1677 envía la Provincia varios religiosos amisionar aCunamá y Caracas.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz