BCCCAP00000000000000000000157

Pasados los años, siendo el referido D. Bernardo Caballero Obispo de Oviedo, y queriendo dar una muestra de gratitud al insigne bienhechor, se promulgó un decreto: «A todos los religio­ sos de Menores Capuchinos de esta Provincia de la Sangre de Cristo de Valencia y Murcia, que son y por cualquier tiempo fueren... reconocidos los grandes beneficios de la liberal y piadosa mano del Rvmo. Sr. D. Bernardo Caballero de Paredes oren con fervor y constancia...». Esta acta, fechada en 25 de abril de 1657, está firmada por todos los definidores y por el Provincial, P. Buenaventura de San Mateo. Casi desde la fundación del convento, siempre fue aspiración de los religiosos tener en la villa una casa que sirviera de enfermería, pues hallándose éste bastante lejos del núcleo de la población, dificultaba la asistencia médica de los enfermos de la comunidad. En 1721, el dona­ do, natural de Caudete, José Vinader, dejó en testamento una casa dentro de la población; pero, al no poder utilizarla a causa de su extremo deterioro, se decidió construir un residencia para los enfermos, con capilla, y que fue, al mismo tiempo, sede de la Tercera Orden Seglar. También, a causa de la gran distancia que mediaba entre el convento y el pueblo, de que las rentas del obispo no solucionaban las necesidades de la comunidad y una serie de circunstancias que hacían difícil la permanencia en el primitivo lugar de la fundación, se proyecto la traslación del convento a la villa. No obstante, aunque se realizaron todos los trámites para el traslado y se contaba con los necesarios permisos, ante una obra de tanta envergadura, se desistió del proyec­ to, y permanecieron los frailes en la primitiva fundación hasta su clausura definitiva en 1835.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz