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ACTIVIDADES MINISTERIALES LOS AÑOS 1727-1746 69 en que así los sobredichos estudiantes como los sacerdotes simples que se hallaren idóneos, se instruyan en las materias morales para que pue­ dan ser útiles a la provincia.» Y agregaba una vez más: «Ordenamos también que en todos nuestros conventos se tengan conferencias mora­ les todos los domingos del año, o en otro día desocupado, en el refec­ torio, por espacio de una hora. Item ordenamos que todos los días, después de la lección del Santo Evangelio, se proponga un caso de moral con su resolución,o se lea un libro de conferencias morales, pero con la advertencia de que sea libro latino y con la brevedad posible para que no se impida la lección espiritual» (15). Esas normas fueron aplicadas a la provincia de Castilla en el Capí­ tulo de 1739, al ser elegido provincial el P. Jerónimo de Salamanca (16). Este mismo insistía en la Congregación intermedia (18 de noviembre de 1740): «No hay apuntamiento más encargado que el caso de moral únicamente al fin de desterrar ignorancia y de que los religiosos abran un libro; pero ninguno hay más despreciado ni abandonado, pues con simples pretextos se pasa todo un año sin hacer una conferencia. Esta culpa sólo se debe imputar a los PP. Guardianes, y a ellos sólo se les reconvendrá en la visita sin admitir excusas frívolas. Y así mandamos que en todos los conventos y en nuestros hospicios, sin que en éstos haya disculpa, se tenga la conferencia todos los domingos; y si acaso las circunstancias impidiesen que sea el domingo, se transfiera al lunes o al día no impedido más inmediato» (17). Se conoce que, no obstante las ordenaciones dadas, existían aún notables deficiencias en este ministerio y se descuidaba igualmente el estudio de la moral. De ahí que el P. Sangüesa se expresara así con la máxima dureza en las ordenaciones dadas al ser elegido Provincial en 1742: «No omitan los PP. Guardianes el caso de moral ni los Pa­ dres confesores dejen los libros, porque desde ahora les aviso que en la visita me han de entregar todos los títulos que tienen de confesar, y después pasaré a examinar a cada uno de por sí; nos ha parecido ya preciso entablar este rigor por la inhabilidad e insuficiencia de muchos y por consiguiente por los abusos que se cometen en los confesonarios; y no hagan juicio que esto se queda sólo en amenaza, porque al día siguiente de haber llegado al convento de la visita, me han de entregar los títulos y después yo mismo quiero ver la aptitud o suficiencia de cada uno» (18). (15) Ordenaciones generales hechas por nuestro Rmo. P. General y Definitorio General, después del Capítulo celebrado en Roma el día 22 de mayo de 1733 (APC, 5/10). La traducción y copia aquí existente lleva antes una carta del Padre general, Buenaventura de Ferrara, cuya fecha es 24 de diciembre de 1735. (16) Ordenaciones y apuntamientos hechos y mandados publicar por nuestro M. R. P. Provincial y RR. PP. Definidores, en el Capítulo celebrado en el convento de San Antonio de Madrid el día 24 de abril de 1739 (APC, 6/10). (17) Apuntamientos y ordenaciones provinciales hechos y mandados publicar en la Congregación que se hizo el día 18 de noviembre del año 1740 (APC, 6/11). (18) Ordenaciones y apuntamientos hechos y mandados publicar en el Capítulo