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5 7 2 LA PROVINCIA DE FF. MM. CAPUCHINOS DE CASTILLA predicó, quizás también en Bilbao y del mismo modo en función solem­ ne y oficial, otro sermón con motivo de ser proclamado rey Fernando VI, que imprimió con este título: El Príncipe de la mejor estrella, el rey de la mayor corona... Don Fernando VI . . . Sermón que predicó el día 19 de septiembre, año de 1746, en la solemnísima aclamación, etc. (35). Conocemos otro sermón predicado por el P. Marquina en ocasión solemne, cual fue la de los funerales celebrados el 26 de enero de 1757, en la iglesia de San Antonio del Prado, por la marquesa de Priego y duque­ sa de Medinaceli (36). Nadie podrá tachar tampoco de gerundiana al Padre Marquina por esta oración sagrada, que, aunque un tanto resa­ biada del gusto de aquellos años, no tiene cosa digna de censura, como tampoco la que pronunció un año después, al tener lugar el aniversario de la mencionada señora en la misma iglesia madrileña de Capuchi­ nos (37). El P. Marquina dedicó sus actividades no sólo a la predicación, sino también a otros trabajos literarios. Así tradujo e imprimió la primera parte de la obra del P. Silvestre Draguetta de Milán: Anuales Ordinis FF. Min. Capuccinorum. Appendix ad tomum tertium, Medionali, 1737, titulándola: Apéndice a la tercera parte de los Anales de la Religión de Menores Capuchinos de N. S. P. S. Francisco (38). En la dedicatoria del mencionado Apéndice dice el P. Marquina había dado ya a la prensa un resumen de la vida de San Fidel de Sigmaringa, de la que se habían hecho dos ediciones, que se habían agotado. Esto mismo confirma el P. Francisco de Ajofrín, agregando estas palabras que tienen valor especial por haber conocido personalmente al autor: «El compendio de la vida de San Fidel, que sale hoy al público, escribió el P. Fray Matías de Marquina, Cronista de esta santa provincia, varón doctísimo y en el siglo uno de los abogados más famosos que tuvo la corte en su tiempo, y a quien consultaban los ministros y consejeros como a oráculo de una y otra jurisprudencia. Dos veces — añade— escribió la (35) Se imprimió en Vitoria por Tomás de Torres y Navarro (1746): 4 ho­ jas, 32 pp. (P alau , ibíd.). (36) Oración fúnebre y expresión sentida en las religiosas exequias cele­ bradas por la Excma. Da. ferónima de Espinóla y la Cerda, Madrid, 1757: 8 ho­ jas, 24 pp. (37) Lleva este título: Oración fúnebre en las exequias de la Excma. Sra. fe- rónima de Espinóla y de la Cerda, duquesa madre de Medinaceli, que en el cabo de año mandó celebrar con fúnebre pompa y magnífico aparato el Excmo. Señor D. Luis de Córdoba..., en el convento de San Antonio del Prado; díjola el P... en 31 de enero de 1758. Se conserva manuscrita en el A rchivo del Duque de Medinaceli, Archivo Histórico, leg. 62, n. 26. (38) El título completo es: Apéndice a la tercera parte de los Anales de la Religión de Menores Capuchinos de N. S. P. San Francisco, dividido en dos partes, que vienen a ser sexto y séptimo tomo de sus Crónicas generales, tradu­ cidas del idioma latino, en que las escribió el R. P. Fr. Silvestre de Milán, teólogo de la misma Religión, en castellano, con las noticias, que nuevamente se han adquirido en diversas Provincias por el... Parte primera o tomo sexto, Madrid, 1758.