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504 LA PROVINCIA DE FF. MM. CAPUCHINOS DE CASTILLA Antonio (2). Este fue el tercero de los hijos de dicho matrimonio (3). Desconocemos dónde estudió las primeras letras y cursó artes y cien­ cias como preparación a una carrera superior; en cambio sí podemos asegurar que tanto nuestro biografiado como su hermano Juan Antonio comenzaron la carrera de Cánones el 13 de septiembre de 1712 en el Colegio Mayor de Santa Cruz de Valladolid; el grado de bachiller lo obtuvo el 26 de mayo de 1713 pero en la Universidad de Irache (Nava­ rra) (4). En Valladolid prosiguió sus estudios hasta marzo de 1720, dando muestras bien patentes de su aplicación y talento excepcional. Antes sin embargo, el 2 de febrero de 1718, recibió la tonsura clerical y, poco después de terminar su carrera en Valladolid, se licenciaba en Cánones por la Universidad de Santo Tomás de Avila (5). El hecho de recibir la tonsura cuando aun no había concluido sus estudios, hace suponer ya entonces la madurez de su espíritu y las aspiraciones al sacerdocio. Todo ello le haría entrever un porvenir halagüeño y lleno de ilusiones y espe­ ranzas y un camino bien abierto para lograr elevados puestos de la carrera eclesiástica. La ocasión se le presentó bien presto. El 23 de enero de 1720 vacaba la canongía doctoral de Salamanca. La oposición para cubrir la vacante debió ser anunciada pronto; a ella se presentaron personas muy competentes: tres doctores y dos licencia­ dos, varios de los cuales habían realizado sus estudios en los Colegios mayores de aquella ciudad. También se presentó Pedro Francisco de Oruña, el futuro P. Colindres, quien podía considerarse un tanto extraño en aquella ocasión. Hecha su oposición el 26 de junio ante 21 miembros del cabildo catedralicio, Oruña consigue en el segundo escrutinio los (2) Archivo Parroquial de Colindres, Libro tercero de Bautizados, f. 31, donde se consigna la partida de nacimiento y bautismo. Aunque uno de los apellidos se pone sólo como «Calderón», a secas, en realidad era «Calderón de la Barca», noble y antigua casa montañesa al igual que la de «Orduña» y «Setién». El P. Felipe de la Gándara, O. S. A., da con gran lujo de pormenores el origen de las mencionadas en su obra: Descripción, armas, origen y descen­ dencia de la muy noble y antigua casa de Calderón de la Barca y sus suce­ siones continuadas... que añadió, enmendó y continuó el P. M. José Rio, O .S .B ., Madrid (1751), 144s. (3) El primero se llamó Diego Manuel, quien sucedió en la casa y fue caballero de la Orden de Calatrava y Corregidor de Alcalá la Real; el segundo, por nombre Juan Antonio, que sucedió al P. Colindres en la Canongía Doctoral de Salamanca y en la Cátedra de Decretales de la Universidad, elevado más tarde a la sede de Osma (Cfr. mi artículo citado, 245, y J uán Loperráez Corva- lán , Descripción histórica del obispado de Osma con el catálogo de sus Prela­ dos, I, Madrid 1788, 569-573. El último fruto de aquel matrimonio fue una hija, María Luisa, que casó en Colindres con Juan de Quintana (G ándara , 147). (4) Archivo Histórico Provincial Universitario de Santa Cruz de Valla­ dolid, Libro de Matrículas (1712-1717), sign. 67, f. 8 , y: Libro de Pruebas (1710- 1713), sign. 157, f. 32r.; Archivo de la Universidad de Salamanca, Libro de Cursos de Cánones (1716-1722), leg. 100, f. 106v., donde se hace informe de lo estudiado por Oruña. (5) Archivo de la Universidad de Salamanca, Libro de Cursos de Cánones, ibid., y . Proceso de Cátedras (1723-1728), f. 4s.