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VIDA ESPIRITUAL EN LA PROVINCIA 441 Tampoco es posible dejar a un lado dos escritos del P. Miguel de Santander, importantes a su vez dentro del marco ascético-místico. Es el primero: Ejercicios espirituales para sacerdotes (46), que tantas ala­ banzas mereció del Bto. Diego José de Cádiz y que éste utilizó luego, sobre todo como lectura de las meditaciones, en los Ejercicios que acos­ tumbraba d irig ir a los eclesiásticos en cuantos pueblos y ciudades misio­ naba. E l segundo llevaba por título: Ejercicios espirituales para religio­ sas (4 7). Uno y otro contienen jugosa e importante doctrina ascético- mística, que es utilizada aun por los predicadores, y el segundo es leído con provecho en conventos de religiosas. Del contenido del segundo se hizo posteriormente una selección, a la que se puso este título: Piadosas meditaciones sacadas del libro de los Ejercicios para religiosas (48). Repetimos una vez más, y el lector lo apreciará fácilmente, que no fueron ni abundantes ni de mérito excepcional las obras anteriormente reseñadas y que se debieron a la pluma de los Capuchinos castellanos en este período que historiamos, relativas a temas de espiritualidad. (46) La primera edición ostentaba el siguiente título: Retiro espiritual para sacerdotes, o el sacerdote preparado para el juicio de Dios en diez días de Ejer­ cicios espirituales, I-II, Madrid, 1802; la segunda, hecha en Madrid, 1804, lleva ese otro que igualmente se repite en las siguientes. (47) Se imprimió por vez primera en Madrid, 1804; logró otras ediciones, la última de las cuales fue en Madrid, 1911. (48) Salió en Burgos, 1865.

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