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3 7 4 LA P R O V IN C IA D E F F . M M . C A PU C H IN O S D E C A ST IL L A y p red icado en la basílica de Santiago (B ilbao) siendo G u ard iá n del conven to de D eusto (10). 3. T am b ién , ap a rte de los p red icad o res, h u b o en esos veinticinco años, cuya h isto ria resum im os en este cap ítu lo , religiosos insignes en la p rovincia, dignos de u n a extensa b iog rafía. Nos con ten tam os de m o­ m en to con a p u n ta r sus nom b res, d ejando p ara la segund a p a rte d a r a cono cer o tro s m éritos. E stá en p rim e r lug ar el P. F rancisco de Solchaga, G en eral q u e fue de la O rd e n , esclarecido p o r varios conceptos, en tre otro s p o r su v a­ len tía en defensa de los derechos de los religiosos. A su la d o o cup aron tam b ién pu esto s destacados los PP . M ariano de B ernardos y Justo de M ad rid , V icarios generales de los C apuch inos españoles. No querem os p asar tam poco en olvido al P. M iguel de S an tan d er, fallecido en S an ta C ruz de Iguña (S an tan d er) el 2 de m arzo de 1831, a los 87 años de ed ad , siendo en terra d o en la iglesia de PP . D om inicos de C aldas de Besaya. El P. S an ta n d er regresó de F ran cia poco después de ser ju ra d a en 1820 la Con stitución de 1812. Ju stam en te, p o r acuerdo del A yun tam ien to sa n tan d e rin o (12 de ab ril de 1820), se tuvo en la cated ral un acto fú n eb re «po r los p rim eros m á rtire s de la lib e rta d » , y a las cu atro de la ta rd e , en las Casas Consistoriales, el ju ram en to d e la Constitu ción, p ro n u n cia n d o en esta ocasión u n a p lá tic a el P. S an tan ­ d er (11). Más ta rd e , al celeb rarse la festiv id ad de San F ern an d o , p ro ­ tecto r del C onsulado de la ciu d ad , p ro n u n ció el paneg írico del san to el P. S an tan d er, serm ón sencillo y de no elevados tonos, que luego se im prim ió (12 ). A p a rtir de esa fecha su v ida tran sc u rre en la m ás com ­ p leta o scu rid ad ; ni aparece en el p ú lp ito , ni tam poco tien e im p o rta n tes activ idades; d ed ica, sin em bargo, sus ocios a tra d u c ir algunas o b ras del francés, que van firm ad as en «las m o n tañ as de S an ta n d er, el d ía de San M ateo, 21 d e sep tiem bre de 1820», p ero qu e no se pu b lican h as­ tio) Sermón que en el solemne novenario celebrado en la Basílica de San­ tiago de Bilbao, desde 28 de abril de este año, a la devoción del M. N. y M. I. Se­ ñorío de Vizcaya, con asistencia diaria de su Diputación general en cuerpo de Comunidad, a jesús Sacramentado, desde la mañana hasta la tarde todos los días manifiesto, para que, por su divina misericordia y la intercesión del glorioso S. Roque, libre a España del Cólera-morbo Asiático, que aflige a la capital de Francia y algunas de sus provincias, Bilbao, 1832. (11) Esa plática, lo mismo que la dirigida a los niños de las escuelas, allí presentes, pueden verse en el libro de Actas del Ayuntamiento Constitucional de esta Ciudad de Santander, año de 1820, ff. 42-46, acta de las funciones del 2 de mayo; la primera se imprimió en Santander, imprenta de don Clemente María Riesgo, 1820, y no son más que dos hojas. (12) Sermón que en la solemnidad religiosa anualmente celebrada por el Muy Ilustre Consulado de esta ciudad, en honor de su Protector San Fernando Tercero de Castilla, predicó el día 30 de mayo de 1820 el Illmo. Señor D. Fr. Mi­ guel de Santander, Obispo Amizonense, en la Iglesia del Convento de Padres Ob­ servantes de San Francisco, Santander, 1820: 10 pp.