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3 1 8 LA PROVINCIA DE FF. MM. CAPUCHINOS DE CASTILLA al pueblo y habían intercedido por varios paisanos ante los generales franceses; que además habían echado sobre sí la carga de asistir al confesonario en el pueblo de La Seca todos los primeros domingos de cada mes, festividades de primera clase y prestar otros servicios (29). Valioso fue también el comportamiento del P. Fidel de Piñera. El mismo expone al rey que había predicado mucho en contra de los franceses en público y en privado, y protestado contra el juramento de fidelidad al rey intruso, por lo que fue detenido (30 de noviembre de 1809), encarcelado, conducido a Pamplona y luego a Francia a sus 62 años de edad, regresando más tarde con la salud muy quebran­ tada (30). Otro Capuchino castellano, el P. Gaspar de San Torcuato, era cape­ llán del regimiento de Valladolid en 1809; asimismo otro también cas­ tellano, el P. Lorenzo de Villafranca, estuvo presente en la batalla de Medellín (28 de marzo de 1809) y con otros capuchinos, cuyos nom­ bres desconocemos, animó a los soldados españoles, asistió a los heri­ dos y dio sepultura a los caídos, marchando luego a Sevilla (21 de abril de 1809) (31). En 1811 el P. Francisco de Solchaga, provincial de Castilla, elevó a las Cortes una Representación que en realidad de verdad es una so­ lemne protesta por haber sido excluidos de formar parte de ellas los prelados regulares (32). Y eleva esa protesta alegando que los religiosos tienen los mismos derechos y tantos o más méritos contraídos en la guerra contra el francés, por lo que se habían hecho dignos de alaban­ zas del pueblo «fomentando la justa causa y presenciándola con su brazo en tantas partidas, que también han comandado con gloria, y de que entre muchos es buen testigo el P. Capuchino Fr. Julián de Délica, bajo el dictado de naturaleza de D. Juan Mendieta, bien conocido por las distinguidas prisiones que hizo del general Franceschi y del vizconde (29) La acusación, 21 marzo 1809, lo mismo que los informes favorables, 26 abril 1809, se encuentran en AGS, Gracia y Justicia, leg. 1248. (30) Memorial al rey, 16 julio 1815, y recomendación del P. Provincial, 16 ju­ lio 1815 (Arch. del Pal. Nacional de Madrid, Personal, Predicadores de S. M. super­ numerarios, P-40). El P. Piñera era entonces Definidor y Calificador del Santo Oficio y pide se le conceda la gracia de predicador supernumerario del rey en la primera vacante que haya. El P. Provincial, Buenaventura de Gumiel, apoya esa petición, asegurando eran muy valiosos los servicios prestados por el citado reli­ gioso en pro del rey, de la patria y religión en la pasada revolución con gran riesgo de su vida en muchas ocasiones. (31) Fr. A. de L eón , f. 160. (32) Representación que en juicio y justicia dirige un Prelado Provincial Ca­ puchino de las dos Castillas a la sabia y católica nación española con su deseada y digna cabeza el señor Rey D. Femando VII (que Dios prospere) a su frente, y Congreso de Cortes Nacionales. Escribíala para la luz e interés público el M. R. P. Fr. Francisco de Solchaga..., a 8 de septiembre de 1811, hallándose emi­ grado en Cádiz por la común y santa causa, Cádiz, 1811; 31 pp.; se reimprimió en Manresa, 1813: 27 pp.

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