BCCCAP00000000000000000000156

144 LA PROVINCIA DE FF. MM. CAPUCHINOS DE CASTILLA Adelantamos que, efectivamente, el Breve de aprobación del Semi­ nario de Toro fue expedido por Clemente XIV el 6 de septiembre de 1770. Cuanto queda indicado fue motivo de inquietudes, roces y disen­ siones, estado que se prolongó por algunos años, según iremos expo­ niendo. Un informe del P. Isidoro de Fermoselte, dirigido al rey en 1776, nos da la explicación de lo sucedido. Afirma éste que tales perturbaciones e inquietudes habían comenzado ya con ocasión de las ordenaciones dadas en 1763 por el P. Colindres a la provincia, y que aumentaron aún más con las que igualmente dio en 1764, llegando a su punto álgido con la erección del Seminario de Misioneros de Toro. Agrega que todas esas ordenaciones iban encaminadas a cercenar abusos y desórdenes que se habían introducido por el poco celo de los prelados; que surgieron no pocas protestas e incluso varios religiosos dirigieron al P. Colindres cartas anónimas, sobre todo cuando se cono­ cieron los estatutos del expresados Seminario. A lo que se añadió que, una vez fallecido el P. Colindres, el P. Provincial, Fidel de Los Arcos, trató de terminar con él, y lo hubiera logrado a no mediar las reales órdenes de 1770 y 1771, que disponían se observasen fielmente las ordenaciones del P. Colindres para toda la provincia y en especial las dadas para el convento de Toro (29). Quizá el P. Fermoselle recargue demasiado la tinta al trazarnos el cuadro de la situación de Castilla en esos años. Providencialmente sucedió en el gobierno al P. Los Arcos el P. Manuel de La Calzada, que se mostró en todo tiempo partidario del Seminario de Misioneros. El P. Los Arcos, a su regreso del Capítulo general, entraba en Madrid el 11 de agosto de 1768, dos meses algo largos antes de la fecha señalada para la celebración del Capítulo provincial. Una de las últimas determinaciones tomadas por la Definición el 15 de septiembre fue que la filosofía se explicase en adelante por el P. Dupasquier; la teología dogmática, por el P. Bernardo de Bolonia, y la moral, por el P. Charmes (30). Así resultó que la escuela escotista, seguida por los mencionados autores, fue la que tuvo entonces preponderancia en los estudios de la provincia de Castilla. El 21 de octubre de 1768 se celebró el anunciado Capítulo. Fue elegido Provincial por segunda vez el P. Manuel de La Calzada. Tanto él como los Definidores resultaron elegidos en el primer escrutinio, a excepción del último Definidor, que lo fue en el segundo (31). Eso parece indicar que, en medio de todo, no existía tanta desunión entre los religiosos de Castilla. (29) Informe del P. Fermoselle al rey, Madrid, 18 mayo 1776 (AGS, Gracia y Justicia, 644). Aquí dice tambin que algunos religiosos osaron incluso burlarse del P. Colindres y que pusieron el apodo de Moncloa al convento de Toro y de «moncloítas» a los que en él residían, mirándolo con verdadero horror. (30) VA, 440. (31) Jbid., 444.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz