BCCCAP00000000000000000000155

30 LA PROVINCIA DE FF. MM. CAPUCHINOS DE CASTILLA E l 27 de mavo de 1605 se celebraba en R om a el Capítulo G e ­ neral de la Orden. En él cesaba de Superior de los Capuchinos San L orenzo de Brindis y era elegido en su lugar el P. Silvestre de Asís. A l m ism o tiempo, aparte de otras determinaciones, era designado C o ­ misario general para las Provincias de T olosa , Cataluña, Valencia y Aragón, el P. Buenaventura de Catanzaro ( 2 0 ). E l 6 de enero de 1606 presidía el Capítulo Provincial de la prim e­ ra de las citadas Provincias en Carcassonne Í 2 1 ). D irig ió luego sus pasos a Cataluña, y. «hallándose d ich o P. Com isario con el P. Provin­ cial v Definidores en Perpiñán por donde com enzó a entrar en esta Provincia a los 6 de febrero del d icho año, y por hallarse el d icho Padre enfermo y que se le iba agravando la enfermedad, se dió prisa de üegar a Barcelona» ( 2 2 ). Fué por esas fechas, sin duda alguna, cuando, deseando de veras la fundación de Castilla y viéndose en la imposibilidad de llesar per­ sonalmente a la Corte, envió dos Padres con esa m isión. E scribió con ellos a varios señores de la Corte, encomendándoles el asunto, v prin­ cipalmente al duque de Lérma, suplicándole favoreciese a los Padres que iban a disponerla mientras él estaba enfermo. L o s dos religiosos enviados fueron los PP. M igu el de Valladolid y Francisco de Baeza ( 2 3 ). D ich os Padres dirigieron sus pasos a la Corte, la cual se en con ­ traba aún a nuestro ju icio en Valladolid, de donde regresó a M adrid en los primeros meses de 1 6 0 6 . H icieron sus gestiones y «su misión loable y religiosamente». Pero «en m edio de la buena acogida y de Biografía hispavo-capuchina, y que trae el P. Campdevano!, Crónica ms. c., t. II, libro IV, cap. 5, ff. 167-74. N o hemos podido dar con la carta del P. General relativa a este asunto; sin embargo, en un «Catálogo del Archivo de Cataluña antiguo», Letra E, Leg. 2, mis­ celáneo, común de Provincia, se lee: «Letras o carta de| N. Rmo. P. General res­ pecto de enviar tres o cuatro religiosos castellanos a Gastilla (1600)». (20) Analecta, V (1889), p. 224.— Libro de los Actos Capitulares de Cataluña, ms. c., f. I4r. (21) C fr. M e lc h o r d e P o b la d u ra , O . F . M . C ap ., Los Frailes Menores Ca­ puchinos en Castilla, M ad rid , 1946, p . 9 , nota I. (22) Libro de los Actos Capitulares, m s. c., f. i4 r. (2 3 ) F é lix d e G ra n a d a , o. c., p. 9.— A g u s t ín d e G ra n a d a , Descripción de los principios y progresos, etc., m s. c., p. 3.— A lic a n t e , m s. c ., p. 120.— Juan d e M o n z ó n . O . F . M . C ap ., Erario Divino, m s. c., ff. 4.v.-5r. L o s cronistas P. Félix de G ranada y P . M o n z ó n ponen estos sucesos el año de 1605, lo cual n o puede ser en m anera alguna, com o tam poco lo qu e dicen relativo al m em orial del P . Sosa, qu e se im prim ió el m ism o año. Por otra parte, el P . A lican te (p. 120) afirma qu e el P. C om isario Catanzaro envió orden á la Provincia d e Vtalencia para que el Padre Francisco de Sevilla fuese tam bién a la C orte con tal objeto d e trabajar la fu n d a­ ción, m archando allá acom pañado del H n o . L e g o F r. D ie g o de M oarat. L o s de­ m ás cronistas nada dicen sobre esto.

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz