BCCCAP00000000000000000000155

REORGANIZACIÓN Y GOBIERNO 129 Por otra parte, al P. Alejandro de Valencia, que ya lo era, se le con­ cedió el honorífico título de Calificador de la Suprema Inquisición el 2 de noviembre del mencionado año (38). Al cesar el P. Ocaña fué elegido Provincial el P. Cristóbal de Mo- rentin, varón de Dios, insigne por sus muchas virtudes. Su vida, en un todo ejemplar, y su gran prudencia en el gobierno, le hicieron amable y deseable de todos sus súbditos. Aunque de naturaleza enfer­ miza, era sumamente competente, habiendo hecho sus estudios en la Universidad de Salamanca (39). Allí había tomado el hábito el 29 de marzo de ¥620 y, pasados seis años, recibía el presbiterado. Su valer y la estima que de él se hacía, se pusieron bien a prueba cuando, al año de ordenarse, era nombrado Maestro de novicios, siguiendo lue­ go ocupando cargos y prelacias sin interrupción hasta su muerte (40). En los años que estuvo al frente de la Provincia (1636-1639) se tomó la fundación de Villarrubia de los Ojos (1638); se puso la pri­ mera piedra del tercer convento de El Pardo (1638), o sea del actual, y asimismo se consiguió el de La Paciencia, de Madrid (1639). Asistió al Capítulo General habido en R.oma el 29 de mayo de 1637, y consiguió para Castilla el que los Capítulos Provinciales pu­ dieran celebrarse de año y medio en año y medio, viniendo práctica­ mente a gobernar cada Provincial un trienio completo (41). A dicho Capítulo General asistieron también, en calidad de Cus­ todios, los PP. Alejandro de Valencia y Serafín de León. Ambos pro­ testaron, como ya lo había hecho el P. Valencia en 1633, sobre la desigualdad de votos de los Custodios de las distintas Provincias, ha ciéndolo en pleno Capítulo y en nombre de las Provincias de Catalu­ ña, Valencia, Aragón, Castilla, Flandes y Valona. Pero, lejos de ha­ cerles caso, al igual que el Provincial de Flandes, fueron tratados bastante mal por e l .Cardenal de San Onofre, que era el Protector. Indignados por- ello, se fueron ante el Canónico Sr. Monserrate, cons­ tituido en dignidad y residente en Roma, para que levantase acta de su protesta (5 de junio de 1637) (42). Es verdad que de momento nada se consiguió; pero pronto, el 20 de mayo de 1638, se levantaron nuevas protestas, que ahora procedían de los Provinciales de Francia (43), y no pasará mucho tiempo sin que logren ló que deseaban, la igualdad de votos. ( 38 ) A. H. N.— Inquisición, Leg. 1 . 188 , n.° 4 . (39) M onzón , ms. c., p. 420. (40 Cfr. nuestro Necrologio, o. c., p. 219 , 31 de agosto. ( 41 ) ED, p. 22 . • ( 42 ) Cfr. dicha acta en Archivo Prov. de Capuchinos de Valencia, Carpeta B, Leg. 61 , n.° 92 c. ( 43 ) Protesta de los Provinciales de Francia (20 de mayo de 1638 ) ( I b i d Car­ peta B, Leg. 61 , n.° 921 .

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz