BCCCAP00000000000000000000155

REORGANIZACIÓN Y GOBIERNO 127 dos unánimes y todos tan deseosos de la mayor gloria de Dios, que no se oía fuera de los límites de ella ni queja, ni descontento, y, si alguna cosa se desquiciaba, la atención de tan grandes Superiores como habían gobernado y gobernaban, así la devolvían a su ser con tanta destreza, suavidad y maña, que más firme quedaba de cualquier quie­ bra después de su reparo, que antes que hubiese amenazado o pade­ cido el daño» (28). El P. Alejandro de Valencia, antes de partir para Roma, previendo lo que por desgracia sucedió, se dirigía a la Provincia por medio de una carta circular, en la que inculca mucho a los religiosos la paz y unión de todos, amonestando que no descuiden en modo alguno el recogimiento y el retiro de los seglares, el respeto a los Prelados y, sobre todo, aue, «habiendo juzgado por medio necesario para la con­ servación de la paz el no tratar de elecciones en materia alguna», man­ daba por santa obediencia «aue no hablen de elecciones futuras de ninguna manera, directa ni indirectamente, ni por escrito ni de ningu­ na manera» (29). Al celebrarse aquel Capítulo General el P. Alejandro protestó v de­ fendió a capa y espada la igualdad de votos para todas las Provincias en orden a los Custodios, pues sabido es que, mientras las Provincias ultramontanas no tenían sino dos Cutodios generales, las cismontanas tenían tres y cuatro, pudiendo asistir todos a Capítulo con voz y voto (30). 4. Pero en tanto que el P. Valencia se encuentra en Koma, «cuan­ do menos se pensaba que pudiera alterarse la felicidad de este sosie­ go, se removieron en su ausencia los ánimos de algunos religiosos al parecer con diferencias propias, pero encaminadas, claro está, al bien común; parecióles que el medio para atajarlas era pedir Visitador, y, como lo pensaron, así se ejecutó, aguaxdando a que el P. Alejandro, después de concluido el Capítulo General, que con negocios de la Ma­ jestad Católica había de pasar a Alemania, con su ausencia se podría mejor conseguir, aue a tener noticia de este intento, las causas no eran tan graves que fácilmente satisfecho el P. General, fuera sin duda se excusara» (31). No sabemos concretamente qué diferencias hayan sido esas que «hubo entre algunos Padres de la Provincia». El hecho es que, estan- (28) M onzón , ms. c., f. 731-. ( 29 ) Ibid., ff. 91 V.- 92 . ( 30 ) Cfr. Protesta de los PP. Alejandro de Valencia y Serafín de León ante el canónigo Sr. Monserrate (5 de junio de 1637 ) (Archivo Prov. de Capuchinos de Valencia, Carpeta B, l.eg. 61 , n.° 920 ). (31) M onzón , m s. c., f. 731,

RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz