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LOS CAPUCHINOSDE NAVARRA Y GUIPÚZCOA EN ACCIÓN 401 provincial de 1795 exime también a los ex Lectores y el de 1827 extiende la misma dispensa a los Padres que han cumplido cuarenta años de hábito; esta gracia fué confirmada en !828 por el P. Vicario General de los capuchinos de España, fray Justo de Madrid 24. Con el mismo fin de excitar al estudio estaba recomendada y man­ dada la celebración de Conferencias morales una vez por semana en todos los conventos 2S. Al principio, en la provincia de Navarra estas Conferencias se reducían a una mera y aparente ceremonia, o bien se las substituía por la lectura de algún libro de moral hecha en común después de leído el punto de meditación. Semejante práctica —declara el P. Colindres— no tiene visos de conferencia, ni excita al estudio para ella, y tiene el gravísimo inconveniente de ocupar el tiempo des­ tinado para la oración, la que ni por éste ni por otro motivo debe impe­ dirse. Y prescribe el método que debería observarse en adelante, con­ forme a la práctica de otras provincias. «Ordenamos dice— que la Rda. Definición depute uno en cada con­ vento que sea presidente de ellas, cuya obligación será poner todas las semanas un papelito en sitio público que sea visto de todos los religiosos, y en él se diga la cuestión o materia de la Conferencia de la. semana siguiente y apunte uno o dos casos prácticos que se han de rase 1 ver acerca de la misma materia, para que todos vayan prevenidos; y en Kegssáo el día determinado se juntarán todos los sacerdotes y coristas ?. .as ¿rs3 de la tarde en el refectorio u otro lugar conveniente. Y o¿ F. Guardián, en los conventos que no excedan de diez sacerdotes, mandará que cada uno de ellos, comenzando del menos antiguo, diga lo que siente acerca de aquella cuestión o materia propuesta y la resolu­ ción que daría en aquellos casos prácticos; y así sucesivamente irán diciendo todos su dictamen con las pruebas o razones que tuvieren para él, callando todos los demás cuando uno habla, para que no haya con­ tiendas. Y finalmente el presidente explicará la materia con más exten­ sión y resolverá los casos dando las razones y pruebas y respondiendo a las que se hayan dicho en contra. «En los conventos mayores bastará que el P. Guardián mande a ocho o diez que digan, como queda referido, por no hacer tan larga la Conferencia si hubieran de hablar todos... «En los conventos en que haya Estudio será presidente de conferen­ cias el P. Lector o a su falta el P. Maestro; y en los otros conventos 24. Catálogo de los Capítulos, p . 704. 25. C apít. Gen. de 1726 ( Analecta Cap., 1892, t. V I I I . p. 81). 27

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