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En el convento de Tafalla las fiestas se celebraron los días 18 y 19 de setiembre. El día 17 a la noche fué la música al convento y cantó la Salve. Después se quemaron fuegos artificiales y se sacó a la hoguera un pellejo de vino, para que bebiesen todos. Al otro día, Misa solemne, a la que asistió el Ayuntamiento en pleno, ocupando sus bancos de ter­ ciopelo, que se trajeron de la parroquia. Después de la función de la iglesia entraron los señores regidores a comer en el refectorio con la Comunidad. A la tarde cantó el Cabildo las Vísperas y salió la proce­ sión. Iban las cofradías con sus estandartes; después las Comunidades de observantes y capuchinos. El estandarte del beato Corleón lo llevaba el hijo del síndico, y éste el de san Serafín. La fiesta del día siguiente la hicieron los Padres observantes, que ocuparon altar y púlpito. Al mediodía ambas Comunidades se juntaron en fraternal banquete. Ese mismo día el Ayuntamiento envió recado para que los dos Guar­ dianes, de observantes y capuchinos, con sus dos síndicos, fuesen al balcón de la Corporación municipal a ver la novillada; y así lo hicieron. Los demás religiosos de las dos Comunidades fueron al balcón de don José de Landivar 2. En el convento de Fuenterrabía, la fiesta se celebró el 16 de octubre. Se llevó al convento el trono de plata que había en la parroquia, se bajó el órgano de Guadalupe y su colgadura. El Ayuntamiento y el Cabildo costearon la música, compuesta del Maestro de capilla de San Sebas­ tián, otro músico de la misma capilla, los clarineros con sus clarines, trompas y violines, el organista de Pasajes y dos tiples, dando para todos ellos la Ciudad y Cabildo cincuenta pesos. La procesión se hizo el mismo día 16 después de cantadas las vís­ peras en la parroquia, desde donde se dirigió al convento. La función principal se celebró el día siguiente. Ofició en el altar el Sr. Vicario don Roque Jacinto de Salazar; el sermón lo tuvo el Padre fray Ramón Cildoz. del convento de la Merced de Pamplona. A la tarde se cantaron las Vísperas con el Santísimo expuesto. Las invitaciones para la mesa las hizo una comisión nombrada por los Cabildos eclesiástico y secular. Al P. Guardián se le pasó orden de que, sin reparar en gastos, hiciera las provisiones correspondientes y convidara a cuantos le pareciese. La mesa estuvo bien servida, según anota la Crónica de aquel convento, y el número de los que comieron ¿OS CAPUCHINOSDE NAVARRA Y GUIPÚZCOA EN ACCIÓN 353 2. L ib ro de cosas notables del convento de Tafalla, fol. 58 s. 24