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años, a la provincia de Nápoles, donde le hicieron Maestro de novi­ cios. Era el P. Arcángel hombre de tanta oración que la mayor parte de la noche gastaba en ella. Fue también con extremo devoto del Nom­ bre dulcísimo de Jesús. «Residiendo en el convento de Nápoles y es­ tando un hijo del Marqués de Santa Cruz apretado de una peligrosa enfermedad, invocando este santo Nombre y formando sobre el enfermo la señal de la cruz, le sanó instantáneamente» ,9. Diósele el cargo de Comisario General para propagar la Orden en España, como queda dicho. Era ya de edad algo avanzada cuando vino de Italia. Fué también Guardián y Maestro de novicios en Santa Eula­ lia y en Gerona, Definidor y Custodio en Cataluña. Murió en el convento de Montecalvario de Barcelona el año de i598. después de haber trabajado felisísimamente en la fundación de la provincia de Cataluña y de haberla ilustrado con admirables ejemplos de perfección religiosa 20. El P. Bernardino de Alhama —o de Aragón— vistió el hábito de la Orden en la provincia romana. Vino a Cataluña en 1578, juntamente con el P. Juan de Alarcón. Fué el primer Guardián de Santa Eulalia y el primer Provincial de Cataluña ; y, por tanto, el primer Guardián y el primer Provincial de los capuchinos en España. Distinguióse por su heroica caridad en la peste que invadió la ciudad de Barcelona en 1589. Murió en el convento de Roma, adonde se había trasladado para tomar parte como Custodio en el capítulo general de 1593. El P. Lorenzo de Huesca vino asimismo de la provincia de Roma. Llegó a Cataluña en 1578, poco después de haberse tomado el convento ríe Santa Eulalia. Fué Guardián muchas veces y Maestro de novicios. Promovió la devoción de Nuestra Señora de la Pobreza, declarándola Patrona del noviciado. Murió en el convento de Montecalvario en 1591. El P. Alonso Lobo, natural de Medina Sidonia, cursó los estudios en la universidad de Alcalá. Vistió el hábito franciscano entre los ob­ servantes de Castilla ; pasó después a la provincia de san José de los descalzos, donde tuvo el cargo de Comisario Visitador; asistió como Custodio al capítulo general celebrado en Roma en 1571. Poco después, con licencia apostólica, se agregó a los capuchinos. Fué uno de los más notables predicadores de su siglo. Predicando una cuaresma en Sala­ manca, más de setecientos estudiantes ingresaron en diversas Ordenes religiosas. Conocido es el elogio que del P. Alonso Lobo hizo el Papa LOS CAPUCHINOS DE NAVARRA Y GUIPÚZCOA EN ARAGÓN 13 19. Armales Cap., II , p. 606. Tercera parte de las Chronicas, p. 281. 20. Véase Rev. Est. Frartc., V , 1910, p. 397-400 ; X X V I I I , 1922, p. 274-288.

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