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de Navarra. El 3 de junio, después de haber comido en Tiebas, llegaba a los términos de Pamplona. El recibimiento que se le hizo fué sencillo. Salieron a recibirle hasta la Cruz Negra el Conde Ayanz, que hacía las veces de Gobernador, y seis religiosos. El P. General rehusó cortes- mente el coche con que le brindó el Conde e hizo su camino a pie hasta el convento. Lo restante de la Comunidad salió con la cruz y dos acólitos hasta la esquina de la pelairía. El Reverendísimo entonó el tedéum, que se prosiguió hasta terminarlo en el presbiterio de la iglesia. Dichas las preces del ceremonial, se despidió el Conde de Ayanz. Fueron a visitar al Reverendísimo todas las Comunidades com pletas, menos los dominicos, trinitarios y agustinos; pues de domini cos fueron seis, de trinitarios, otros seis, y de agustinos, ocho. Visitá ronle también la Corte y Consejo, la Diputación, el Cabilao y aparte el señor Prior de la catedral. Lo propio hicieron el Ayuntamiento, el alcalde don Francisco Galdeano, el Vicario General y el Sr. Obispo. Del convento de religiosas clarisas de Santa Engracia fueron seis sacerdotes, y otros tantos capellanes del convento de agustinas recole tas. Las monjas de San Pedro y las descalzas enviaron recado con un sacerdote. En una mañana se volvieron todas las visitas de Comunidades, Di putación, Cabildo y Ayuntamiento, Obispo y Vicario General, Ministro de la Corte y Consejo, Alcalde y Prior de la Catedral. A las monjas envió al Secretario español P. Pablo de Colindres. La Diputación del Reino y la Corporación municipal le recibieron en sus salas capitula res ; el Cabildo en casa del señor Aguerre. El 11 de junio se celebró el Capítulo provincial. La víspera de ese día el P. General notificó por su secretario a todo el Capítulo la Bula en que Benedicto XIII restablece los Discretos según la forma de las Constituciones en todas las provincias de España, revocando la de Ino cencio XII que los abrogaba en las mismas provincias. La Bula fué aceptada, nemine discrepante. El Rmo. P. General presidió el Capítulo. Concurrían como Vocales además del Provincial actual, todos y solos los Guardianes y Discretos; era la norma impuesta por las Constitucio nes. En consecuencia de ello, viéronse excluidos de aquellos comicios dos Ex-Provinciales, los dos Custodios Provinciales y tres Definidores actuales. Los Discretos enviados por los conventos eran los siguientes: Padre Félix de Ablitas, Definidor 2." y Discreto de Pamplona; P. Jaime de Garinoain, Ex-Provincial y Discreto de Tafalla; P. Francisco de Azpeitia. Discreto de Rentería; P. Pedro de Legaria, Discreto de Tu- t,OS CAPUCHINOS DE NAVARRA Y GUIPÚZCOA EN ACCIÓN 285
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