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CAPITULO IX Q U E R E L L A E N T R E H E R M A N O S (1640-1656) SUMARIO: X. Pídese al General Moncalieri la separación de navarros y ara­ goneses.—2. Contestación del P. General.—3. La misma súplica al Capítulo provincial.—4. Nueva instancia al General Caltagirone.—5. Infructuosa tentativa en el capítulo general de lfi50.—6. Intervienen las Cortes de Na­ varra.—7. Concédese la separación dentro de la misma provincia.—8. El convento de Rentería agregado a los de Navarra.—9. Fundación del Con­ vento de Los Arcos. FUENTES MANUSCRITAS : X. Arch. general de Navarra : a) neg. ecles., leg. 2 ; b) Indice de Cortes, I—tom. III. II. Arch. Prov. Cap. Nav : Asuntos provinciales. Crónica del convento de Los Arcos. LITERATURA POSTERIOR : MÚGICA (Serapio,), Indice de los documentos del arch. munic. de San Sebastián, 1898, p. 291-299.—HL'ARTE, KL Capu­ chino Español. Desde su fundación , los conventos de capuchinos de Navarra y Gu ipú zcoa estuvieron unidos a los conventos del reino de A ragón , form ando todos juntos una sola provin cia . C orriendo los años, la experiencia enseñó que los genios de navarros y aragoneses eran opues­ tos, resultando de esa diversidad el no tenerse aquel amor fraternal que debe haber entre religiosos. Los navarros, en consecuencia, piden su separación de los aragoneses, juzgándola necesaria para la paz y qu ie­ tud de todos. El R ein o de Navarra, representado en sus Cortes y su D ipu tación , aparece en esta contienda com o el P rotector de los capu ­ ch inos navarros, apoyando sus aspiraciones divisionistas. 1. L o s sucesos que vamos a referir no podrán sorprender a quie­ nes no ignoren que igual género de discordia existía en el seno de diversas fam ilias religiosas. Antes que los capu chinos, habíanse se­ parado de los aragoneses los dom in icos y carmelitas descalzos. En ! 706 los carmelitas observantes de Navarra solicitan la protección de