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6 3 4 - L a P r o v in c ia C a pu c h in a d e N a v a r r a - C a n t a b r ia - A r a g ó n Iglesia de Aguarico. Con ella la estructura eclesial hasta entonces enmarcada en una Prefectura Apostólica pasaba a configurarse en Vicariato Apostólico, reconociéndose la labor realizada por el conjunto de misioneros que habían participado en el nacimiento y crecimiento de aquella Iglesia local. Existía una cierta diversifícación de fuerzas activas, de agentes de pastoral y el proceso de indigenización de esta Iglesia, aunque incipiente, estaba adquiriendo fisonomía propia. Esto explica una primera característica que puede asignarse a la tercera época que tratamos ahora de describir. Cuando Mons. Jesús Langarica renunció a su cargo de Prefecto Apostólico, en 1982, los misioneros se plantearon muy seriamente si había llegado el momento en que los capuchinos debían retirarse de la dirección de la Iglesia de Aguarico. Se realizó una discusión fraterna y se decidió presentar a la Conferencia Episcopal del Ecuador y a la Nunciatura Apostólica una petición formal para que el próximo Vicario Apostólico fuera un sacerdote ecuatoriano: los capuchinos deseaban colaborar con él, haciendo que la Iglesia de Aguarico adquiriera lo antes posible fisonomía nacional. Estos buenos deseos fueron denegados con delicadeza y diplomacia por los organismos oficiales de la Iglesia, que consideraban prematuro una cambio de esta naturaleza, allí donde la totalidad del clero era extranjero y donde los sacerdotes ecuatorianos se tendrían que encontrar insuficientemente arropados. Con la muerte de Alejandro Labaca la Iglesia de Aguarico experimentó unaverdaderaconmoción interior, de laque los capuchinos participaron de manera muy especial. No se trata de una conmoción hacia el desánimo, sino un nuevo afianzamiento en sentido profundo y en la vocación específica de la Iglesia local. Todos los agentes se sintieron estimulados y alentados por el ejemplo de entrega y generosidad que supuso la muerte de Alejandro e Inés, considerados desde el primer momento como ejemplos y mártires de la caridad. La fecha de su muerte y sus sucesivos aniversarios dieron ocasión a reuniones de los agentes de pastoral del Vicariato que analizaron su

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