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C apítulo V II. A ctividad en U ltam ar - 615 hermanos colaboranendistintas fraternidades. Existen gruposjuveniles en algunos centros. En el año 81 se inicia un Aspirantado interno en Ibarra, para jóvenes de más de 16 años, que posean al menos 3 años de bachillerato y que se integran para sus estudios en el Colegio “ San Francisco” de Ibarra. En el año 80 se había iniciado el noviciado con 3 jóvenes, después de que durante 13 años la viceprovincia no había tenido ningún novicio. En el año 83 existen ya 3 centros bien constituidos de formación: Aspirantado, Postulantadoy Postnoviciado. Se cuenta con 8 aspirantes. Se ha elaborado un Directorio de formación, siguiendo las orientaciones del Directorio de formación ofrecido por la CONVEC. 3.3. En el capítulo de 1985 la Implantación de la Orden se consideró opción prioritariade laviceprovincia Y , como consecuencia, se intensificó el trabajo vocacional y de formación de los aspirantes a la vida capuchina. En 1987 la mitad de los hermanos estaba ubicada en casas de formación. Existían 38 aspirantes en los cursos superiores de bachillerato, 5 postulantes, 3 novicios y 7 profesos temporales. Se disponía de un Estatuto que orientara las tareas formativas. En esa época se abría un centro de formación en Gualea, donde aspirantes procedentes del medio rural y ya adultos, pudieran realizar estudios de ciclo básico, antes de entrar en el postulantado. 3.4. Ya por entonces se interrogaba insistentemente sobre el modelo de capuchino que debía conformar el proyecto formativo. “Tratamos de formar un capuchino, cercano al pueblo, misionero, que mantenga sus raíces culturales en la forma de vivir, orar, de organizar la vida del seminario y la vida de fraternidad” . 3.5. Esta profunda reflexión sobre la naturaleza del modelo capuchino se encuentra íntimamente relacionado con un tema que afectó a la reflexión frecuente que los hermanos realizaron sobre la naturaleza del hombre ecuatoriano, al que estaban llamados a evangelizar y con quien querían en realidad realizar la implantación