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406 - L a P rovin cia C apu china de N a v a r r a - C a n t a b r ia - A ragón que se había dado en la etapa anterior llevaba a un tipo de fraile que no se iba a integrar en las tradicionales presencias de la provincia, se decide dar un giro nuevo a la formación teológica en modos más estables, lo dice con claridad la “ Carta del Definitorio Provincial al presentar la tabla de cargos provinciales y familias conventuales: “ Tercera (opción en el apartado “ La formación en la provincia” ). In iciar, ya desde ahora, como fraternidad del postnoviciado para este trienio, la comunidad que, Dios mediante, se abrirá en Vitoria. Aun satisfaciendo con ello el viejo deseo provincial de fundar en Á lava , voz que de nuevo en este capítulo provincial se ha dejado sentir, hemos de manifestar que el deseo prioritario en esta ocasión ha sido crear una fraternidad de formación que ojalá sea al mismo tiempo casa de acogida para posibles vocaciones de la zona. Estamos en tierra euskaldún y bien deseable sería en este plan formativo la presencia de un hermano vascoparlante. E l deseo hasta el presente no ha podido ser satisfecho. A l tomar esta decisión tampoco queremos imponer una palabra sobre lo que en su día, estabilizadas las etapas de formación, podría pensarse como postnoviciado” 32. La nueva fraternidad se estableció en la Avda de Los Huetos 25,1° izda y dcha y 2o izda, residiendo a llí hasta el año 1984 en que se pasó a los cercanos pisos de la calle Valentín de Foronda 6, 9oA y B y 8, 9oD, donde aún reside. Los estudiantes acuden a clase a la Facultad de Teología del Norte de España (en V itoria) y completan su formación para la Vida Religiosa acudiendo al Instituto Teológico de Vida Religiosa de Vitoriaanejo a la Facultad. E l primer responsable de esta nueva presencia fue el José MaFonseca (1981 -1987), al que siguieron Juan Ma Castro (1987-1992), Jesús Torrecilla (1992- 1995) y Mario García (1995-2000). Si se miden los frutos por la perseverancia en la Orden hay que decir que V itoria tiene un nivel aceptable, puesto que de los 30 estudiantes que han pasado por esa casa solamente 13 dejaron la vida religiosa. Pero más allá de la cuestión numérica, y a juzgar por la