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C a p í t u l o III. L a v id a d e l a s f r a t e r n i d a d e s - 335 sábados y domingos (ocasión privilegiada cuando lamisa era por un cofrade difunto), romerías de primavera, novena a la Virgen de Codés, cartas a la cofradía y el empeño de que los seglares se implicaran más y más en el culto. Parte del plan pastoral fue la redacción y aprobación de los nuevos Estatutos de la Cofradía. Consiguió del Gobierno de Navarra una subvención de 80 millones para la rehabilitación del santuario y la hospedería adjunta. Con esa ayuda y la colaboración de los fíeles, Codés presenta hoy otro aspecto. Él mismo fue peón infatigable en estas obras: nueva instalación eléctrica con transformador, saneamiento de aguas residuales, muro de contención y saneamiento de la humedad, plantación de 100 robles y 13 plataneros; arreglos interiores en la iglesia y coro; remodelación de la hospedería que tiene nueve habitaciones dobles, sala de estar, cuartos de aseos, bar-restaurante. En fin, al concluir su ministerio en junio de 1999 sobre la mesa quedaba otro proyecto de 22 millones para acondicionar y embellecer el entorno. La vida de fraternidad Este es el retrato que hacen los hermanos de su vida y presencia entre estas gentes: “ Como fraternidad inserta en unmundo rural y en zona económicamente deprimida, procuramos acompañar a las gentes de nuestros pueblos, en gran parte constituidos por "mayores" yjubilados,en sucaminarcristiano tradicional. Participamos asimismo con los sacerdotes diocesanos en las reuniones y retiros de formación que organizan. En todo momento nuestra espiritualidad franciscana debe estar basada en la sencillez y en la cercanía a nuestras gentes” . Tras el capítulo de 1999 la comunidad, compuesta de cuatro hermanos sacerdotes, es ésta: Miguel Ángel Cabodevilla, superior, Serafín Arbizu, vicario y ecónomo, Félix Irure y Alberto García. Miguel Ángel tendrá la responsabilidad del santuario de Codés