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C apítulo I. O tros cinco lustros - 101 sólo a lo esencial, dejando que el tiempo vaya sacando las conclusiones que en germen están invisceradas en este singularCapítulo Provincial Extraordinario (IV CPE97). 1. La preparación del IV CPE97 Este Capítulo no estuvo nunca al margen en la agenda del nuevo Ministro y su Defínitorio y se fue planificando en los meses siguientes, de modo que apareciese en el calendario provincial de 1996-77 como una de las acciones privilegiadas. 1.1. Apenas terminado el Capítulo Ordinario de abril de 1996, el Defínitorio nombró una Comisión preparatoria para que elaborase el Instrumento de trabajo, que fuera estudiado en las fraternidades para encauzar el tema. Este documento contenía material muy apreciable, que pasó al Capítulo a través de los diversos filtros normales en la Provincia. Sus tres sugestivos capítulos: Una Provincia que busca futuro, dinamizar lo posible, dejar lo custionable y trabajar con visión de Provincia fueron sustanciales para lapreparacióny realización del Capítulo. Como se ve, la Provincia olvidó el método de temas y ponencias, compuestas por expertos, y prefirió un documento único y global, que proyectase todo el problema. Este Instrumento estaba redactado para el mes de septiembre de 1996 a fin de que fuese tenido en cuenta en la reflexión de las fraternidades desde el principio del nuevo curso. 1.2. Se sabe que las fraternidades trabajaron con entusiasmo y dedicación, sobre todo en los casos en que la suya aparecía en el Instrumento con algún atisbo de duda sobre su supervivencia. Es seguro que la Comisión preparatoria recibió agudas críticas e incluso se advirtió cierto movimiento dialéctico en el OPI de la Provincia. Este primer paso preparatorio resultó en último término eficaz. 1.3. La preparación se hizo más visible desde principio de 1997. Sobre todo, cuando se implicó a las fraternidades y a los religiosos en el nombramiento de delegados para dicho Capítulo. Siguiendo el