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Trienio 1957-1960 45 prueba del noviciado. La escuela pretendía formar hombres, y en este orden consiguió frutos notorios. En quienes perseveraron, y en quienes vol­ vieron a la calle. Se escribió en el principio de la escuela: «Desconocen la finalidad de estas Escuelas profesionales quienes las han valorado tan sólo como centros donde se han de formar electricistas, carpinteros o trabajadores especialistas. Su finalidad es muy otra: recoger e impedir que se malogren las vocaciones prematuras; y en este compás de espera, ante la puerta del noviciado preparar lo mejor posible a estos futuros religiosos en el aspecto cultural, técnico y religioso, para que el día de mañana de­ sempeñen con mayor competencia su labor junto al sacerdote en nuestros conventos y misiones». La escuela se inició con pocos muchachos, y fue creciendo año tras año hasta alcanzar la cifra de más de dos docenas. Su problema más agudo fue siempre el reclutamiento de vocaciones. Los directores apreciaban que su funcionamiento requería de 25 a 30 alumnos, a fin de conseguir clima de seriedad y madurez; aunque de ordinario no llegó a esas cifras. No obstante, fue un intento tan cultivado que saltó a la consideración de organismos nacionales y a la atención de otras provincias religiosas. La escuela se fue apagando por diversos motivos socio-religiosos, que van desde la desorientación frente al fenómeno religioso, hasta la creación de puestos de trabajo en las zonas menos desarrolladas. Aprovechemos este párrafo para insinuar que durante este trienio se dedicó atención especial a los hermanos jóvenes, ya profesos, organizando unos ejercicios anuales en el colegio de Lecároz para todos los que no habían cumplido seis años de profesión. La experiencia fue positiva, se llegó a organizar otra tanda para hermanos que habían pasado esa prueba de los seis años. 6. Iniciativas apostólicas El ministerio de nuestros religiosos entre fieles decrecía notoriamente. Para la evangelización extraordinaria se había recurrido a las campañas organizadas oficialmente por la asesoría religiosa de sindicatos, por los organismos para tierras americanas o por las que nuestros religiosos bus