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460 Capítulo V I I — Actividad en ultramar En octubre comenzamos a celebrar misa en la casa privada de la fa­ milia Dávila, junto a los terrenos de la futura parroquia. En 1955 se construyó un salón parroquial que servía para reuniones sociales y para la misa de los domingos. En 1956 se inauguró la iglesia parroquial, bendi- ciéndola oficialmente el Sr. obispo, Thomas K. Gorman, y en octubre de 1959 se edificó la actual rectoría o casa central, que fue pagada total­ mente por donaciones, especialmente por el P. Canon, superior de los PP. Paúles y párroco del Holy Trinity (Dallas). Amueblar la casa corrió a cargo de la orden. El costo total, unos 50.000 dólares. El 17 de setiem­ bre de 1969 tomó posesión de la parroquia el P. Jerónimo Lecumberri, dedicándose de lleno al desarrollo de la vida espiritual de la misma y llevando al mismo tiempo a cabo importantes mejoras materiales. Con la buena cooperación de nuestros humildes feligreses se inauguró en octubre de 1970 el edificio de la escuela de religión con clases para 8 grados, con sistema de aire acondicionado. También en esa misma fecha se inauguró el Marillac Center, cuyos gastos fueron pagados enteramente por la diócesis, poniendo la administración y dirección en manos de las hermanas de la caridad. Durante todo el año desarrolla este centro un magnífico programa de actividades sociales ayudando de diversas maneras a las familias pobres, no sólo con comida y ropa, sino también cultural­ mente con clases de inglés, problemas legales, artes del hogar y sana re­ creación para niños de edad pre-escolar y otros programas de recreo para ancianos. A principios de 1971 se construyó en los terrenos de la parroquia una casa sencilla, pero muy cómoda, propiedad de la orden, para hospedar a los visitantes, por no haber lugar suficiente en la casa central. En octu­ bre de 1971 se inauguró el salón parroquial con capacidad para unas se­ tecientas personas sentadas, pero que muchas veces se acomodan más de mil; está dotado de aire acondicionado, amplia cocina, órgano para las misas de niños y cursillistas, etc. El costo fue de ciento ochenta y cinco mil dólares a ser pagados a medias por la parroquia y por el centro de cursillos. Actualmente se ha pagado gran parte de la deuda parroquial. Están en la parroquia de Lourdes los PP. Jerónimo Lecumberri, superior y párroco, Angel Pérez, José Miguel Cenoz, director diocesano de cursillos, Eradio Azcona, encargado de Sta. Teresita, José María Sá- daba e Ignacio Cizur.