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Trienio 1954-1957 29 año siguiente y respondió al siguiente temario: Virtudes que ha de practicar el superior (prudencia, caridad y observancia regular), defectos que más han de evitar los superiores (olvido de su santificación, atención primordial a los de fuera, crearse una situación de privilegio, engreimiento), acción para asegurar la pobreza, el silencio y el retraimiento del mundo (no proce­ dimientos de violencia, pero cuando los recursos paternales se agotan sin resultado, el bien de la orden y el de los mismos religiosos culpables exi­ gen el rigor). En sesiones de estudio se escucharon informes sobre la situación de la orden tercera, la propaganda del escapulario de san José, encomendado a nuestra orden y las pláticas a los religiosos. Junto a esta reunión de superiores locales cabe anotar la reunión de provinciales de España en Valencia, septiembre de 1955, bajo la presi­ dencia del padre general, Benigno de Sant’Ilario Milanese. Se tiene la im­ presión de que dicho ministro general desconfió no poco de las normas de apostolado dictadas en el sexenio anterior, por apreciar que el esfuerzo de adaptación hería a nuestra legislación y a nuestra fisonomía. Baste re­ cordar sus tres cartas sobre la penitencia, febrero de 1955, sobre el rezo del oficio divino, mayo de 1955 y sobre la obediencia religiosa y francis­ cana, enero de 1956. En ellas se escuchan muchas más palabras de alerta que de adaptación. Lógicamente, fue lo que se escuchó también en la reunión de provinciales, con severas llamadas de atención sobre el peli­ gro de la ideología moderna, el prurito de imitar a otros institutos, em­ pleo de la radio y asistencia a espectáculos. Merecían análisis minuciosos las normas dadas sobre apostolado, parroquias y administración de bienes. Entre las orientaciones dadas para nuestras casas de formación, llamó ya entonces la atención aquella que restringía la lectura de revistas a los alumnos de filosofía y teología, «aunque se trate de revistas científicas». En la reunión de agosto de 1956, presidida por el padre general, se estudiaron los siguientes temas: Acomodación de los estudios al bachi­ llerato, la creación de una casa interprovincial en Madrid, la ordenación del capítulo provincial, retrasando la formación de las familias a los 15 días siguientes. Al calor de estas reuniones deben explicarse iniciativas de observan­ cia, que se inculcan durante el trienio, por ejemplo, normas sobre obe­ diencias y viajes, salidas al extranjero con la aprobación de los responsa­ bles de las casas de estudio, invitación a todas las comunidades, dispensa

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