BCCCAP00000000000000000000143
20 Capítulo I — Cinco lustros circular a toda la orden para presentar el problema de la educación de la juventud en nuestras casas de formación. Se aprecia en la misma una lau dable iniciativa por cultivar este aspecto fundamental para la supervivencia del instituto; aunque los planteamientos parecen demasiado moralizadores a la hora de juzgar la fidelidad a la vocación, las defecciones y la felicidad de la vida religiosa. Se debía educar en los aspectos sobrenaturales tradi cionales, ya que todo lo demás resultaba novedad perniciosa. Al reseñar el trienio siguiente tendremos ocasión de aludir a la elección del P. Benigno y de su ministerio general, como contexto de nuestra evolución. 4. Marcha general de la provincia Descendiendo de planos, sería necesario no olvidar que en este trienio se iniciaron las asambleas regulares de los provinciales de España. La cele brada en abril de 1953 se inspiró en la reunión de provinciales de Italia, típica para apreciar el enfoque de la orden y muy en consonancia con el ministerio general recién estrenado. En dicha reunión española se reiteró la celebración del retiro mensual y se concedió, como gracia, unos días de vacaciones a los religiosos. Se aceptaron normas severas sobre el manejo y administración de dinero, siguiendo a los superiores italianos; igualmente, sobre apostolado; por ejemplo, no aceptar ciertos ministerios cuando lle vaban inherente la exención de la observancia o la independencia de los superiores. Esta temática no aparece de momento en las reuniones de la provincia, cauces normales y resonadores de los problemas del momento. Tenemos anotada la de profesores del año 1952, que fue dedicada a educación so cial y urbanidad en nuestras casas de formación. Se trasluce quizá la acción de religiosos y profesores más jóvenes, que aspiraban a la elevación per sonal de nuestros alumnos y al destierro de cualquier manifestación tosca y plebeya. Los predicadores dedicaron su atención a la oratoria de los santos padres, de oradores más modernos y de algunos modelos franciscanos. Tema difícil y propio de especialistas; en todo caso, sirve para apreciar qué aspectos de la evangelización preocupaban en aquel momento preciso. Aun-
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NDA3MTIz